El edadismo está cada vez más extendido en la sociedad a pesar del rol esencial que tendrán las personas mayores en un futuro cercano
Expertos reunidos en el seminario académico El fenómeno del edadismo, organizado por el Centro de Investigación Ageingnomics de Fundación MAPFRE y la Universidad Carlos III de Madrid este martes, han coincido en destacar la importancia de la reducción de la brecha digital, el impulso de la colaboración intergeneracional y evitar estereotipos negativos como claves para combatir la discriminación de las personas mayores.
Como han constatado, combatir la discriminación por edad es “determinante” para mantener la generación de la demanda y el crecimiento económico, en un contexto en el que la población mayor crece respecto a otros rangos de edad, según destaca Fundación MAPFRE en un comunicado.
La jornada ha contado con la participación de la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, la directora general del IMSERSO, Mayte Sancho y el director del Centro de Investigación Ageingnomics de Fundación MAPFRE, Juan Fernández Palacios.
La baja natalidad y la pérdida de poder adquisitivo plantean un nuevo modelo
“El colectivo de mayores de 55 años se consolidará como el segmento de población con mayor protagonismo económico y social. En España ya es una realidad. La combinación de baja natalidad, longevidad y mayor esperanza de vida libre de discapacidad es un cóctel que hay que gestionar porque abre la puerta a una organización económica, social y cultural completamente distinta a la que hemos conocido hasta el momento”, ha destacado durante la clausura del seminario el presidente de Fundación MAPFRE, Antonio Huertas.
Huertas también se ha referido a la necesidad de combatir las brechas de desigualdad, “que, además de ser injustas para quienes las padecen, perjudican al conjunto de la sociedad en tanto y cuanto tienen un coste de oportunidad que estamos perdiendo”, y ha hecho hincapié en que “la mejor herramienta para combatir el edadismo es el fomento de la convivencia y colaboración intergeneracional, en los distintos ámbitos y, particularmente, en la actividad productiva y el mercado laboral”.
En el encuentro ha participado, además, el profesor titular de la Universidad Carlos III de Madrid, Miguel Usábel, y distintos investigadores del ámbito académico y profesional, quienes han analizado la evolución demográfica y sus consecuencias, así como la inclusión digital de los mayores de 55 años, el edadismo en los servicios de urgencias hospitalarios o la empleabilidad sostenible, clave para prevenir la discriminación por edad en el ámbito laboral.
El papel de la digitalización
“Mejorar las competencias tecnológicas de los sénior, generar nuevos espacios de participación social y educativa y contribuir a reducir estereotipos entre generaciones implica beneficios significativos, favorece el acercamiento digital entre generaciones y reduce el edadismo”, ha subrayado la profesora de la Universidad de Murcia, Silvia Martínez De Miguel.
También ha habido una ponencia sobre el fenómeno del edadismo en los servicios de urgencias hospitalarios que ha impartido Ana García, sanitaria del Hospital Clinic Barcelona, quien ha destacado que los servicios de urgencias hospitalarios representan “un pilar fundamental de nuestro sistema sanitario que hay que seguir mejorando con criterios basados en la evidencia científica y con objetivos, como el mantenimiento de la funcionalidad”.
Por su parte, Alejandra Chulián, psicóloga sanitaria del Instituto ACT, de la Universidad de Zaragoza, ha analizado la problemática de los estereotipos negativos hacia la vejez que afrontan muchas personas mayores y que mucha veces no se ajustan a su realidad y les afectan desde el punto de vista emocional.