Con 91 años recién cumplidos, Gonzalo Suárez es una figura inclasificable dentro del audiovisual español. Director, guionista, productor, novelista y periodista, ha sabido combinar el drama con el humor, la narración con la experimentación y la fantasía con la reflexión filosófica. Según ha informado Europa Press, la Junta Directiva de la Academia ha concedido este galardón honorífico por unanimidad, destacando su “filmografía sorprendente” y su apuesta continua por “la imaginación frente a las formas narrativas usuales”.
Autor de más de veinte largometrajes, su carrera incluye títulos imprescindibles como Ditirambo (1967), El extraño caso del doctor Fausto (1969), Parranda (1977), Epílogo (1984), Remando al viento (1988) con la que ganó el Goya a Mejor Dirección, La reina anónima (1992) o Oviedo Express (2007). Su estilo libre ha atraído a intérpretes como Fernando Fernán Gómez, Maribel Verdú, José Sacristán, Aitana Sánchez-Gijón, Javier Bardem, Hugh Grant o Charo López, entre muchos otros.
Su último trabajo cinematográfico es el cortometraje Alas de tiniebla, y también ha explorado el cine de animación y ensayo con El sueño de Malinche. Paralelamente, continúa activo como escritor: acaba de publicar El caso de las cabezas cortadas y ha reeditado La suela de mis zapatos, una recopilación de sus textos periodísticos más personales.
Premio Nacional de Cinematografía en 1991, Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes y Caballero de las Artes y las Letras de Francia, Gonzalo Suárez fue también uno de los precursores del nuevo periodismo en España, y un referente intelectual de la llamada Escuela de Barcelona en los años 60.
Sobre el galardón, el cineasta ha afirmado: “Me alegra mucho este premio porque abarca toda mi obra, aunque siento añoranza de que no me pille haciendo cine. Me gustaría volver a decir ‘acción’ y ‘corten’ porque el cine es acción”. También ha confesado que no suele volver a ver sus películas: “Si volviera a empezar, haría lo mismo: tratar de inventar el cine”
Se entregará en la próxima gala de los Premios Goya, que se celebrará en Barcelona. Suárez, que no ha preparado discurso, asegura que improvisará “conectado con la situación”, aunque ya sabe dónde colocará la estatuilla: “En un lugar prominente de mi casa”.