Los incendios forestales siguen golpeando con dureza a España. Galicia, Castilla y León y Extremadura concentran los focos más graves, con miles de evacuados, carreteras cortadas y un despliegue de medios que no logra contener por completo el avance de las llamas.
En Pontevedra, la situación se ha complicado en las últimas horas con dos nuevos fuegos en Oia y Vilaboa. En Oia, el incendio se originó junto a la carretera PO-552 y, en cuestión de minutos, pasó de amenazar viviendas a devorar el monte, favorecido por el viento y la sequedad del terreno. La cercanía de las llamas obligó a evacuar casas y un camping en Mougás. Vecinos desesperados intentaron frenar el fuego con cubos de agua, mangueras y palas, mientras una espesa nube de humo obligaba a cortar la carretera y dejaba atrapados a varios vehículos.
En Vilaboa, otro foco también forzó desalojos. Ambos permanecen en nivel 2 de alerta debido a su proximidad a núcleos de población. Pese a la movilización de helicópteros, avionetas, brigadas y motobombas, el avance sigue siendo imparable.
La Xunta ha confirmado que ya son siete los incendios activos en Galicia, cinco de ellos en Ourense, donde se han calcinado más de 82.000 hectáreas. El más preocupante, en Larouco, ha cruzado el río Sil y se ha extendido hasta Lugo.
En Castilla y León, seis incendios permanecen en nivel 2, con unas 2.000 personas evacuadas en 50 localidades. La mayor presión se concentra en León y Zamora, sobre todo en El Bierzo y los Picos de Europa.
Aunque en Zamora parte de los vecinos ya han podido regresar a sus casas, preocupa el fuego de Moncabril por su cercanía a una central hidroeléctrica, donde se trabaja a contrarreloj para proteger la infraestructura.
La única nota positiva llega desde Extremadura. En Cáceres, el incendio de Jarilla —que ha devorado más de 16.000 hectáreas— está prácticamente perimetrado.
Aún continúan algunas evacuaciones en Hervás, el valle del Jerte y La Garganta, pero los equipos de extinción aseguran que la estrategia ha funcionado. Cerca de 500 efectivos permanecen en la zona para evitar reactivaciones.