En la X Jornada Gregorio Peces-Barba, que conmemora el 45 aniversario de la Constitución, el expresidente del Gobierno, Felipe González, ha destacado la urgencia de proteger la salud constitucional. En su intervención, González ha denunciado que la Carta Magna es «atacada» de manera «despiadada e irracional» y que los valores que sustentan la convivencia están bajo una amenaza.
González, junto al exdiputado del PSOE Eduardo Madina, ha hecho un llamamiento a la sociedad para que reaccione frente a esta situación. El expresidente ha enfatizado la necesidad de defender la Constitución y considera esencial abordar reformas consensuadas.
«Ahora estamos viendo que es necesario hacer una defensa de la Constitución y de sus posibles y necesarias reformas que inciden en consensos como los que hubo hace 45 años», ha reclamado González en relación al ataque a los jueces y magistrados por parte de los partidos independentistas catalanes y en defensa, al mismo tiempo, de la división de poderes.
En cuanto a la Ley de Amnistía, González ha reiterado su rechazo, calificándola como una «autoamnistía». El expresidente ha señalado que el problema no radica solo en aquellos que buscan desmantelar el sistema, sino en quienes, respaldados por una mayoría, no deberían ceder ante chantajes ni condicionamientos. Esta postura se enmarca en su oposición a la Ley de Amnistía pactada entre el PSOE, ERC y Junts.
Finalmente, González y Madina han coincidido en su desacuerdo con la distinción entre indultar y amnistiar. Para ellos, esta diferencia es crucial, ya que el indulto implica «perdonar», mientras que la amnistía conlleva «pedir perdón» a quienes han cometido delitos. Madina ha expresado su desconcierto ante la comprensión de esta última, y ha enfatizado su falta de acuerdo con dicha posición.