La ONG Amnistía Internacional ha condenado el acto calificándolo como un insulto a la población palestina
Estados Unidos ha vetado este viernes una resolución presentada ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para pedir un alto el fuego humanitario en la Franja de Gaza. La medida se ha tomado después de que el secretario general de la ONU, António Guterres, invocara el artículo 99 de la Carta Magna del organismo.
El texto recibió el respaldo de 13 países, mientras que Estados Unidos, como miembro permanente con derecho de veto, se posicionó en contra. Por su parte, Reino Unido optó por la abstención.
“Aunque EEUU apoya una paz duradera, no respaldaremos una llamada al alto el fuego inmediato porque Hamás no está buscando ni una paz duradera ni una solución de dos estados“, indicó el embajador adjunto de Estados Unidos, Robert Wood, ante Naciones Unidas.
Críticas a la postura de Estados Unidos
La ONG humanitaria Amnistía Internacional ha condenado el veto de Estados Unidos, calificándolo como un insulto a la población palestina afectada por los ataques en la guerra contra Hamás. La secretaria general de la organización, Agnès Callamard, ha expresado su repulsa, al declarar que el país norteamericano ha mostrado “cruel desprecio por el sufrimiento de los civiles” en medio de la devastación en la Franja de Gaza.
Amnistía Internacional ha acusado a Estados Unidos de utilizar su derecho de veto “descaradamente como un arma” para prevalecer sobre el máximo órgano ejecutivo de la ONU, socavar su credibilidad y capacidad para mantener la paz y la seguridad internacional.
La organización considera moralmente indefendible el uso del veto y un abandono del deber de Estados Unidos en la prevención de crímenes atroces y el respeto al derecho internacional.