El consumo de cannabis entre jóvenes puede estar impulsado por la presión social y las redes sociales

12 de julio de 2024
2 minutos de lectura
Cannabis / EP

El 26,9% de los adolescentes afirma haber consumido esta sustancia al menos una vez en la vida

La presión social y las redes sociales destacan como principales motivos por los cuales los adolescentes comienzan a consumir cannabis, de acuerdo con los datos obtenidos de la encuesta ESTUDES sobre consumo de alcohol y otras drogas, y respaldados por el estudio Percepción del consumo de cannabis en población adolescente: metasíntesis de estudios cualitativos.

El cannabis es la sustancia ilegal más popular entre la población de 14 a 18 años en España. El 26,9% de los adolescentes afirma haber consumido esta sustancia al menos una vez en la vida y el 1,3% reconoce hacerlo diariamente. Su consumo en esta etapa es un grave problema de salud pública, y se relaciona con problemas de salud mental, de memoria y aprendizaje, bajo rendimiento escolar, el incremento del consumo de otras drogas y la delincuencia.

El artículo, publicado en Gaceta Sanitaria, analiza 22 estudios realizados en once países entre el 2000 y el 2024 para tratar de identificar las razones detrás de este consumo y el riesgo que perciben los jóvenes, con el objetivo de «desarrollar políticas sanitarias y educativas dirigidas a la prevención de consumo de cannabis» en adolescentes.

Factores externos

Entre los principales motivos para el consumo, destaca la influencia de factores externos, como la presión social; muchos adolescentes «admitieron sentir temor a la marginación a sentirse excluidos si no fumaban cannabis», han subrayado los investigadores en el estudio. Además, el consumo de esta sustancia en el entorno familiar, por parte de hermanos mayores o madres y padres es un gran factor promotor.

Por su parte, la publicación de fotografías o vídeos en redes sociales que muestran jóvenes o artistas consumiendo cannabis se ha identificado como «factores que contribuyen al consumo», además de hacerlo «más atractivo» y generar «una percepción de riesgo reducido». La facilidad de adquirir esta sustancia es otro de los motivos por los que los adolescentes comienzan a consumirla.

Muchos adolescentes mencionan en los estudios que el consumo de cannabis les proporciona una sensación de bienestar social y emocional, les ayuda a relajarse, reduce el estrés, provoca la desaparición de preocupaciones y miedos y les proporciona placer. En líneas generales, los jóvenes creen que el consumo esporádico no conlleva graves riesgos para la salud, ya que «no se percibe como una droga dura» y que es «menos dañino para la salud que las drogas en general y el tabaco en particular, por considerarlo más natural y contener menos sustancias químicas», han apuntado en el artículo.

«Es esencial que ofrezcamos a los jóvenes las herramientas necesarias para manejar el estrés y las emociones negativas de manera saludable», ha incidido el estudio. Para ello, se deben crear entornos que apoyen su bienestar emocional y social a través de la colaboración entre padres, educadores y responsables de políticas públicas que lleven a cabo una estrategia integral, así como fomentar la difusión de conocimiento e información sobre los riesgos del consumo de sustancias nocivas.

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