Hoy: 23 de noviembre de 2024
El Tribunal Constitucional (TC) ha decidido este miércoles, por unanimidad, admitir a trámite la cuestión de inconstitucionalidad planteada por el Tribunal Supremo (TS) respecto a la ley de amnistía y aceptar la abstención del magistrado progresista Juan Carlos Campo, según ha comunicado el propio TC.
Los 12 magistrados, tanto los siete de tendencia progresista como los cinco conservadores, han coincidido en tramitar la cuestión de inconstitucionalidad presentada por el TS en julio pasado, al considerar que el artículo 1 de la ley podría infringir el derecho a la igualdad, así como los principios de seguridad jurídica, prohibición de la arbitrariedad y exclusividad jurisdiccional.
En consecuencia, el Pleno también ha acordado comunicar esta decisión a la Sala de lo Penal del TS para que, de conformidad con el artículo 35.3 de la Ley Orgánica del TC (LOTC), permanezca suspendido el proceso hasta que se resuelva definitivamente la cuestión de inconstitucionalidad.
Cabe recordar que el Supremo acudió al Constitucional en el caso de dos condenados por desórdenes públicos por unos hechos ocurridos en Girona, tras la sentencia que condenó al ex vicepresidente catalán Oriol Junqueras y otros líderes del procés, por lo que será este procedimiento el que quede en suspenso.
Por otro lado, el TC ha aceptado igualmente por unanimidad la abstención de Campo, que decidió apartarse porque cuando era ministro de Justicia en el Gobierno de Pedro Sánchez dijo que la amnistía era “claramente inconstitucional” en los informes sobre los indultos a los condenados por el procés.
Esta no es la primera vez que Campo se abstiene en cuestiones relacionadas con la amnistía. Ya se retiró en noviembre de 2023, cuando la ley aún estaba en proceso de negociación, en un recurso de amparo presentado por un ciudadano. En esa ocasión, argumentó que lo hacía para preservar la “imparcialidad” del TC.
La abstención de Campo, quien forma parte del bloque progresista del tribunal, no alteraría el equilibrio de fuerzas entre los sectores, manteniendo una proporción de 6 a 5, con el bloque conservador en minoría.
Una vez admitida, la respuesta al TS tardará en llegar entre seis meses y un año y, aunque no se podrá extender automáticamente al resto de cuestiones de inconstitucionalidad y recursos que puedan llegar, porque el contenido impugnado y los argumentos expuestos pueden variar, lo cierto es que marcará el camino.
De acuerdo con las fuentes del TC consultadas por Europa Press, cuando se resuelvan las dudas manifestadas por el Supremo, será el turno de los recursos de inconstitucionalidad. De momento, el TC tiene en sus manos los presentados por el PP y varias autonomías gobernadas por los de Alberto Núñez Feijóo, como Madrid o Andalucía.
El magistrado conservador José María Macías se ocupará de la ponencia sobre el recurso firmado por Génova, según ha tocado por turno de reparto. Las fuentes aseguran que no sopesa abstenerse, a pesar de que se pronunció contra la ley de amnistía como vocal del CGPJ.
De los demás recursos de inconstitucionalidad registrados por las comunidades populares, Campo ha recibido el de Cantabria, pero se espera que se abstenga y, por turno, recaiga en su compañero conservador César Tolosa.
Al margen de las abstenciones, ya son varios los recursos acompañados de recusaciones contra tres magistrados: el presidente del TC, Cándido Conde-Pumpido, la ex alto cargo de Moncloa Laura Díez y Campo. Sin embargo, en la sede de Domenico Scarlatti ven poco recorrido a estas peticiones.
Ventilados los recursos de inconstitucionalidad, la corte de garantías se detendrá en los de amparo, que a diferencia de los primeros sí podrán acumularse para que un solo magistrado se ocupe de las ponencias de todos ellos.
Así las cosas, las impugnaciones que puedan presentar los líderes del procés condenados y procesados, como Junqueras y el ex presidente catalán Carles Puigdemont, respectivamente, tendrán que esperar.
Todavía no han podido presentarlos porque sus respectivos casos tienen que agotar antes el recorrido judicial en el Supremo, donde hay recursos pendientes.
En lo tocante a Junqueras y los demás condenados, la Sala de lo Penal tiene sobre la mesa los recursos de súplica. Y, una vez ventilados, aún deberían presentar incidentes de nulidad antes de llamar a las puertas del TC.
Respecto a los procesados, el magistrado instructor Pablo Llarena rechazó esta misma semana los recursos de reforma, si bien se han elevado a la Sala de Apelaciones, a lo que habría que añadir los eventuales incidentes de nulidad.