El vehículo se precipitó desde una estructura elevada conocida como la pasarela Vespa y posteriormente se incendió
Al menos 21 personas, incluidos dos niños y varios turistas europeos, perdieron la vida en la noche de este martes en Venecia. Un autobús con combustible de metano se precipitó desde un puente y se incendió, marcando lo que el alcalde Luigi Brugnaro describió como “una escena apocalíptica” en un mensaje en Facebook.
El balance provisional, anunciado por Luca Zaia, gobernador de la región de Véneto, donde Venecia es la capital, reporta al menos 21 víctimas y más de 20 personas hospitalizadas, muchas en estado grave, en lo que calificó como “una tragedia de enormes proporciones”.
Por su parte, Michele di Bari, delegado del Gobierno de Venecia, ha identificado a los 15 heridos, entre los cuales se encuentran dos españoles, cuatro ucranianos, un alemán, un francés, un croata y dos austriacos.
Entre los fallecidos se encuentran turistas ucranianos, alemanes y franceses, según informes. De los 15 heridos trasladados a tres hospitales de la zona, 5 están en estado grave, incluyendo una niña de 5 años con quemaduras.
Un total de 19 personas fallecieron en el lugar del accidente, mientras que otras 2 perdieron la vida durante su traslado en ambulancia. Los heridos, entre ellos 3 menores y 6 en estado muy grave, fueron trasladados a hospitales de Mestre, Mirano, Dolo, Padua y Treviso, según información de fuentes de la alcaldía de Venecia.
Detalles sobre la ubicación y posible causa del siniestro
El accidente tuvo lugar entre Mestre y Marghera, dos localidades pertenecientes al municipio de Venecia, poco después de las 19H30 locales mientras el vehículo realizaba un trayecto desde el centro histórico de Venecia hacia un camping.
En una primera hipótesis, se sugiere que el conductor, un italiano de 40 años que también perdió la vida, pudo haber experimentado malestar, ya que no hay indicios de frenado y el autobús circulaba en línea recta antes de romper el guardarraíl, precipitarse al vacío e incendiarse, detalló a los medios el comandante de la policía municipal de Venecia, Marco Agostini.
El fiscal jefe de Venecia, Bruno Cherchi, anunció la realización de un examen sobre lo sucedido, dando inicio a una investigación médico-legal y continuando con la identificación de las víctimas.
Plan de urgencias
Ante la emergencia, la dirección de asuntos sanitarios de Venecia activó de inmediato el plan de urgencia por flujo máximo de heridos, convocando a médicos en servicio y personal de urgencias.
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, expresó “sus profundas condolencias” y afirmó estar en contacto con el alcalde Luigi Brugnaro y el ministro de Transportes Matteo Salvini para seguir las noticias sobre esta tragedia.
Según informes del diario Il Corriere della Sera, el autobús de línea se desvió de la vía sobre el puente y cayó cerca de las vías férreas ubicadas más abajo, tras un vuelo de aproximadamente 30 metros. El incendio del autobús pudo ser provocado por el contacto con los cables eléctricos, según el mismo medio.
El ministro del Interior, Matteo Piantedosi, señaló que “el factor que agravó la situación fue el uso de metano, y por lo tanto, el fuego se propagó rápidamente”. “El equilibrio es trágico y dramático, y temo que aumentará”, añadió en declaraciones a la cadena pública Rai1.
El accidente más grave de este tipo en Italia ocurrió el 28 de julio de 2013, cuando un autobús que transportaba a unas 50 personas de la provincia de Nápoles, que regresaban de una excursión de tres días, se precipitó 30 metros desde un viaducto cerca de Avellino. En ese trágico suceso, perdieron la vida 38 personas.