Hoy: 22 de noviembre de 2024
La investigación llevada a cabo por el Grupo de Delincuencia Económica y Delitos Tecnológicos de la Policía Nacional se originó a raíz de una denuncia presentada en las dependencias policiales.
En la información proporcionada por la Jefatura Superior este viernes, la víctima recibió un mensaje a través de mensajería instantánea, supuestamente de una persona conocida de su entorno. Después de varias conversaciones, el remitente ganó la confianza de la víctima, aprovechando que esta solía hacer donaciones con regularidad.
En ese orden, le hizo creer que era un gestor de inversiones y lo persuadió para que invirtiera en criptomonedas, argumentando que los beneficios se destinarían a obras de caridad. El individuo se ofreció a guiarlo en estas inversiones.
A pesar de sus dudas iniciales, la denunciante finalmente aceptó la oferta con la intención de ayudar a los más necesitados. Realizó transferencias bancarias a cuentas en Lituania e Italia, con montos que oscilaban entre 7.000 y 10.000 euros.
Cuando la víctima agotó los fondos en sus cuentas bancarias, el presunto gestor le propuso continuar con las donaciones en efectivo. En este punto, un joven de origen chino recogía el dinero en entregas pactadas previamente.
En enero de este año, la víctima efectuó dos entregas en un corto período de tiempo, siempre siguiendo el mismo modus operandi. El supuesto gestor enviaba al joven chino, y la entrega de un paquete con el dinero acordado se realizaba sin apenas intercambio de palabras.
A finales de enero, gracias a las gestiones de investigación, la Policía tuvo conocimiento de una nueva entrega de dinero en metálico. Se estableció un dispositivo de vigilancia que permitió la detención de un joven de origen chino en el momento en que acudía a recoger la entrega de dinero, siendo posteriormente trasladado a dependencias policiales.
Las investigaciones y gestiones realizadas después de la detención revelaron que este individuo formaba parte de un grupo criminal con una clara distribución de funciones.
Su papel consistía en actuar como correo para recoger el dinero en efectivo y entregárselo a su superior jerárquico después de realizar la recolección. No se descartan futuras detenciones de personas vinculadas a la red criminal.