Hoy: 25 de noviembre de 2024
Durante ocho años, Álvaro Morata y Alice Campello, quienes comparten cuatro hijos, eran considerados una de las parejas más sólidas y enamoradas del panorama nacional. Su inseparable vínculo y la felicidad que reflejaban en cada aparición pública hacían que su reciente separación sorprendiera aún más.
Apenas una semana antes de anunciar el final de su relación, habían compartido en redes sociales fotos de su unión y complicidad durante unas vacaciones familiares en la costa italiana, según informa Europa Press.
Pero, ¿qué desencadenó este precipitado anuncio de su ruptura, por separado y a través de sus historias de Instagram? Sendos comunicados redactados a marchas forzadas por parte del futbolista y la modelo tras los rumores que habían comenzado a correr como la pólvora y que habrían empujado a Morata a anunciar la separación, y que según TardeAR no habría consultado a Alice su intención de hacer publica la ruptura. La pareja ha decidido poner fin a su historia de amor de manera inesperada y de mutuo acuerdo.
La presentación del delantero como nuevo jugador del AC Milán el pasado viernes 9 de agosto, sin la presencia de la italiana y sin su alianza de boda puesta, encendió las primeras alarmas de que algo no iba bien en la pareja.
Entonces, Campello intentaba apagar el fuego justificando su sonada ausencia por la dificultad de mudarse y buscar casa teniendo cuatro hijos pequeños (los mellizos Alessandro y Leonardo (seis), Edoardo (tres) y Bella (uno).
Sin embargo, sus sospechosos movimientos en redes sociales apenas 48 horas después fueron la pista definitiva de que algo no iba bien en la pareja, y acabaron por obligarles a hacer pública su ruptura antes de lo pensado.
Y es que este domingo Alice modificaba su Instagram, donde pasaba de ser Alice Campello Morata a llamarse Alice Campello. Minutos después cambiaba su imagen de perfil, poniendo una foto de ella sola en lugar de la que antes tenía con Morata, presumiendo de su felicidad. Por último, eliminaba la última instantánea destacada de su muro en la que aparecía con su hasta ahora marido y sus niños.
Cambios que no pasaron desapercibidos para sus seguidores y que desataron no solo los rumores de crisis sino también las especulaciones de una presunta falta de respeto o deslealtad por parte del futbolista.
Algo que la empresaria negaba indignada, estallando con un contundente mensaje que nada hacía presagiar que el anuncio de su ruptura se produciría horas después: “Estoy asombrada de la cantidad de mentiras que están diciendo. Álvaro es la mejor persona que existe y en la vida me ha faltado al respeto y yo tampoco. Si tengo una certeza en la vida es el respeto recíproco que nos hemos tenido y nos tenemos. No os creáis nada de las cosas que dicen terceros que no tienen ni idea. Y todas estas movidas por haber quitado unas fotos… Me parece alucinante las películas que se monta la gente en la cabeza”, escribía.
Rumores y especulaciones a las que Morata no dudaba en poner fin anunciando su separación a primera hora del pasado lunes, dejando a propios y a extraños en shock. A través de un mensaje publicado en Instagram el delantero dejaba claro que no había existido ninguna falta de respeto entre ambos y, confesando que se trataba de una decisión muy dolorosa, pedía respeto y empatía tanto para él como para Alice de la que ha dicho que siempre tendrá un lugar importante en su corazón en estos complicados momentos.
Un comunicado que habría pillado por sorpresa incluso a la italiana, ya que aunque su ruptura se habría producido hacía dos semanas, sería definitiva y ya la habrían comunicado tanto a su familia como a su entorno más cercano, todavía no habrían decidido hacerla pública. Algo que cambió después de los rumores de deslealtad que comenzaron a circular en redes el pasado domingo.
Minutos después del comunicado de Morata, era Alice la que rompía su silencio a través de su perfil de Instagram. Hasta tres historias en apenas unas horas en las que hay un denominador común. Dar la cara por su ya exmarido y dejar claro que no ha habido ni terceras personas ni ningún tipo de falta de respeto que haya sido el detonante de su ruptura.
Los motivos, según apunta su entorno, pasarían más bien por un desgaste en la convivencia y continuos desencuentros que, poco a poco, y unidos al complicado año que ha vivido el futbolista en lo profesional y que le habría pasado factura, habrían acabado por minar a la pareja.
Y aunque habrían luchado por superar su crisis durante estas vacaciones, decidieron que lo mejor para ambos y para sus cuatro pequeños era poner punto y final a su matrimonio. “Siempre nos hemos prometido, por respeto a todo lo que hemos vivido, no llegar nunca al punto de hacernos daño o ser tóxicos, y de acabar antes de ello, y así ha sido”, aseguraba Alice en su comunicado.
Una separación que por el momento parece definitiva, aunque todavía quedan por escribir varios capítulos de lo que sería un cuento de hadas, así como destaca la prensa italiana, donde la pareja es muy popular, pero no ha tenido un final feliz.