La combinación ganadora en el sorteo judicial celebrado en las instancias de la Plaza de Castilla y otras superiores corresponde a los números 12, 16, 17, 18, 20 y los números complementarios 8 y 9. Y parece que los ganadores han sido entre otros la esposa del presidente del Gobierno, Begoña Gómez, el exministro José Luis Ábalos, el comisionista Víctor de Aldama y el exasesor Koldo García, además de Cristina Álvarez, la asesora de Moncloa que participó en gestiones de la cátedra de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), y David Sánchez, hermano del Número1.
Todos han sido agraciados con citaciones judiciales para prestar declaración en los procesos abiertos para investigar diferentes presuntos delitos de corrupción que tocan de lleno al entorno familiar y político del jefe del Gobierno, al menos el que fue su entorno político más directo.
Lo que sucede es que esta combinación ganadora más que felicidad trae mala hostia en la esferas socialistas, y un golpe de realidad después de tanto corazón y entrega durante el congreso federal celebrado en Sevilla, en el que yo he visto amor verdadero y rendición incondicional al mesías entre sintonías, abrazos y selfis. Un golpe de realidad que parece un puñetazo en un ojo (¡Dios, lo que duele!) y la sensación de profunda tristeza que dejaba el final de las vacaciones y del verano para enfrentarse de nuevo a gastos, problemas y jefes. Pues eso es lo que toca en la casa del PSOE en un mes navideño en el que a más de uno se le van a indigestar los turrones y las frutas escarchadas.
Lo de Sevilla ha estadio bien mientras duró, pero la vida sigue su curso y los jueces y la UCO de la Guardia Civil siguen haciendo su trabajo por mucho que les pese a los dirigentes socialistas. Así que el juez del Tribunal Supremo Leopoldo Puente ha acordado fijar la declaración voluntaria del exministro y diputado José Luis Ábalos para el próximo 12 de diciembre, a las 10 horas, en la causa abierta en su contra por la supuesta contratación irregular de mascarillas durante la pandemia.
El instructor también ha acordado citar a declarar como investigados al empresario Víctor de Aldama el 16 de diciembre y al exasesor de Ábalos Koldo García el próximo 17 de diciembre.
Un día después toda la atención se reserva para Cristina Álvarez, la asesora de Moncloa que participó en gestiones de la cátedra de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), llamada a declarar como testigo, y el mismo día, que se presume intenso, de esos que le gustan tanto al presidente Sánchez, en una providencia el titular del Juzgado de Instrucción Número 41 de Madrid ha acordado a su vez fijar fecha para la declaración como investigado del directivo del IE Business School y exconsejero de la Comunidad de Madrid con Esperanza Aguirre, Juan José Güemes, y tendrá como guinda la presencia en los juzgados de Begoña Gómez.
Güemes compareció en calidad de testigo ante el juez y salió como investigado tras reconocer que había dado la orden de contratar a Begoña Gómez para dirigir el África Center.
Además, en una providencia el juez Juan Carlos Peinado le cita a comparecer el próximo 20 de diciembre. El titular del Juzgado de Instrucción Número 41 de Madrid adopta esta decisión después de que la defensa de Gómez aportara unos correos electrónicos en los que se evidencia que Álvarez participó en gestiones de la UCM mientras Gómez codirigía uno de sus máster.
Y tras pasar días tan señalados como Nochebuena y Nochevieja, la titular del Juzgado de Instrucción nº 3 de Badajoz, Beatriz Biedma, ha llamado a declarar como investigados al hermano de Pedro Sánchez, David Sánchez Pérez-Castejón, director de la Oficina de Artes Escénicas, y al presidente de la Diputación de Badajoz y secretario general del PSOE de Extremadura, Miguel Ángel Gallardo, el próximo 9 de enero. proceso que se sigue contra el hermano del presidente del Gobierno por prevaricación, malversación o tráfico de influencias, entre otros.
La cosa no parece un regalo de Reyes y tampoco la citación por parte de Tribunal Supremo el 8 de enero como testigo a Miguel Ángel Rodríguez, jefe de Gabinete de la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, así como a ocho periodistas, en el marco de la causa donde investiga al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, por la presunta revelación de secretos contra el novio de Díaz Ayuso, Alberto González Amador.
Qué, ¿se atreven a echar a la Primitiva? Ya saben que al que no juega no le toca y aquí hay de los que han apostado y mucho. Veremos si se llevan el bote.