Los efectos de la borrasca Ciarán se sentirán principalmente a partir del jueves, con frentes que ingresarán en el noroeste de la península y provocarán precipitaciones fuertes, ocasionalmente acompañadas de tormentas en Galicia, que se encuentra en alerta roja por fenómenos costeros, así como en el área Cantábrica y los Pirineos.
Además, las precipitaciones se extenderán al resto de la península y a las Islas Baleares, aunque con menor intensidad hacia el sur y el área mediterránea, sin afectar al sureste de la península, según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
En total, 47 provincias estarán en alerta el jueves debido a la lluvia, el viento o los fenómenos costeros. El riesgo de fenómenos costeros será significativo en las costas de Galicia (con alerta roja en A Coruña), Asturias, Murcia, Baleares, Ceuta, Melilla, Murcia y diversas provincias de País Vasco, Comunidad Valenciana y Cataluña.
También se emitirán avisos por lluvias en las cuatro provincias de Galicia, donde se esperan acumulaciones de hasta 40 litros por metro cuadrado en una hora en diversas zonas. Además, se alertará por riesgo de lluvias en Huesca, Jaén, León, Guipúzcoa y Lérida.
En cualquier caso, durante el jueves, el fenómeno meteorológico más relevante será el viento fuerte del oeste, con ráfagas muy intensas (superiores a 70 km/h) de forma bastante generalizada, alcanzando los 90 km/h en amplias áreas del norte, el interior peninsular y las Islas Baleares, e incluso superando los 100 km/h en zonas altas, especialmente en el litoral cantábrico y áreas del este y sureste de la península.
Con la llegada de una masa de aire más frío, las temperaturas descenderán y, en consecuencia, la cota de nieve también lo hará de manera significativa, situándose entre los 1.200 y 1.400 metros en la mitad norte de la península, lo que podría dar lugar a las primeras nevadas de la temporada en las áreas montañosas, aunque se esperan que sean de poca importancia.
Se pronostica un descenso en las temperaturas mínimas en la mitad noroeste de la península, con la posibilidad de heladas en Pirineos y ligeras en otras zonas montañosas del norte y sudeste. No se esperan cambios significativos en las temperaturas máximas.
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha señalado que en los próximos días, al igual que en las semanas anteriores, se mantendrá la influencia de sucesivas borrascas atlánticas con sus frentes asociados, afectando a toda la península y a las Islas Baleares, con especial énfasis en el cuadrante noroeste de la península.
La Aemet anticipa que el viento persistirá, especialmente al comienzo del día, aunque claramente menos intenso que el jueves, sobre todo en el cuadrante suroeste y el centro de la península, donde las ráfagas no serán tan fuertes. Además, se mantendrán condiciones marítimas adversas, especialmente en el litoral cantábrico, aunque mejorarán a lo largo del día.
Para el sábado 4 y el domingo 5, es altamente probable que una nueva borrasca, de características similares a Ciarán y acompañada de sus frentes asociados, vuelva a afectarnos con efectos similares. Es bastante factible que esta nueva borrasca se desplace hacia el mar del Norte durante el día, lo que gradualmente mejorará las condiciones en cuanto a precipitaciones, viento y mar, marcando el fin de este episodio meteorológico.