La Fiscalía Anticorrupción no observa ilegalidad alguna y archiva la denuncia presentada el pasado mes de febrero por los grupos parlamentarios del PSOE, Más Madrid y Unidas Podemos en la Comunidad de Madrid por un posible caso de corrupción al beneficiarse el hermano de la presidenta, Isabel Diaz Ayuso, con un contrato para adquirir 250.000 mascarillas por 1,5 millones de euros.
En el decreto de archivo, el fiscal jefe, Alejandro Luzón, detalla que Tomás Díaz Ayuso, el hermano de la presidenta, dada su experiencia en el sector “desde finales del siglo pasado” y contactos con China, fue quien buscó y convenció al gerente de la empresa Priviet, Daniel Alcázar, especializado en material textil, para que contratase con la Comunidad de Madrid durante la pandemia de coronavirus. Él fue quien elaboró la oferta, pero no intervino ante la sanidad madrileña. Su documento fue remitido por Alcázar a la Administración mediante un “correo con copia oculta” sin que se supiera que él era el verdadero autor de esa oferta para obtener el contrato de 250.000 mascarillas por 1.5 millones de euros, que reportó al hermano de la presidenta madrileña unos ingresos por fijo más comisión de 234.103 euros.
El fiscal afirma que Tomás Díaz Ayuso ha ofrecido una explicación “coherente” a su participación en el contrato y que la facturación y cobro de la comisión fue “transparente” y declarada a Hacienda. También dice durante la investigación del caso, no consta intervención alguna, directa o indirecta de su hermana, la presidenta Isabel Díaz Ayuso, para la adjudicación, o que Tomás hubiera utilizado su nombre para lograr el contrato.
Por ello, el fiscal Luzon afirma que “no se deducen indicios razonablemente verosímiles”, de la participación de Isabel Díaz Ayuso en la contratación. Sin embargo, aunque Anticorrupción, en España, haya cerrado esta causa, La Fiscalía Europea mantiene abierta otra similar por “malversación, cohecho y fraude a los intereses financieros de la Unión Europea”.
Ayuso lo ha celebrado hoy en el hemiciclo de la Asamblea de Madrid, en el transcurso de la sesión plenaria de los jueves. La presidenta, ante la algarabía de sus acólitos, ha remarcado su inocencia y la de su hermano. ”Esto es así porque en la Comunidad de Madrid no hay corrupción, porque en la Comunidad de Madrid no ha habido corrupción, porque no he tomado una sola decisión desde que soy presidente de la Comunidad de Madrid para ayudar a un solo familiar o a un solo amigo a beneficiarse del patrimonio de todos los madrileños”, ha señalado nada más tomar la palabra en el pleno.
Finalmente, ha sostenido que lo que ha pasado sería “como para pedir la dimisión de la izquierda al completo empezando por la líder de la oposición”, Mónica García.