La Agencia Espacial Española (AEE) ha lanzado este sábado una alerta a los operadores de satélites y redes terrestres: extremar la vigilancia. ¿La causa? Una potente eyección de masa coronal (CME) impactó la magnetosfera terrestre durante la madrugada, desatando una tormenta geomagnética severa con un índice Kp 8, uno de los niveles más altos en la escala de actividad solar, según una información publicada en Europa Press.
La fulguración, clasificada como M8.2 y originada en la región activa AR4100, ha provocado una actividad solar inusual que, según la AEE, podría intensificarse en las próximas horas. Aunque el nivel Kp ha bajado a 7,3, los modelos advierten que la situación podría recrudecerse.
La Agencia Espacial Europea (ESA) mantiene el seguimiento a través de su red de clima espacial. La tormenta ha sido clasificada como G4, en una escala que va de G1 (leve) a G5 (extrema), con posibles efectos en redes eléctricas, comunicaciones por radio de alta frecuencia y navegación GPS.
Por ahora, no se han reportado incidentes graves en satélites ni en infraestructuras terrestres, pero la AEE advierte que continuará supervisando el fenómeno en coordinación con las agencias internacionales para reaccionar ante cualquier eventualidad.
Las autoridades insisten en mantener actualizadas las previsiones y extremar las precauciones mientras dure la alerta. Aunque el impacto no ha sido crítico, la actividad solar recuerda la vulnerabilidad de las comunicaciones y los sistemas tecnológicos ante los caprichos del Sol.