El PSOE formalizará este lunes la expulsión de José Luis Ábalos, exministro de Transportes y antiguo secretario de Organización del partido, tras 15 meses de expediente sancionador. La Comisión Ejecutiva Federal, reunida en Ferraz, dará el paso definitivo con el aval del instructor del caso interno, que recomienda la expulsión como militante.
Se trata del desenlace esperado desde que el nombre de Ábalos quedó vinculado indirectamente al llamado caso Koldo, por el que fue suspendido de militancia en febrero de 2024 tras negarse a entregar su acta de diputado y pasar al Grupo Mixto. El detonante: su responsabilidad política por haber nombrado como asesor ministerial a Koldo García, epicentro de una presunta trama de comisiones irregulares vinculadas a contratos públicos durante la pandemia, según una información publicada en Europa Press.
Fuentes socialistas confirman que la resolución sancionadora ya está firmada y que la Ejecutiva del partido, convocada este lunes, respaldará sin fisuras la recomendación de expulsión. El movimiento coincide con la dimisión de Santos Cerdán como secretario de Organización, cargo que heredó de Ábalos y que también ha quedado salpicado por el caso.
«Se ha cerrado el expediente sancionador de José Luis Ábalos con la recomendación de expulsión del militante. Se aprobará en la Comisión Ejecutiva Federal de hoy», aseguran desde la dirección del partido.
Ábalos fue una de las figuras más visibles del PSOE en la etapa de consolidación de Pedro Sánchez como secretario general. Mano derecha en la maquinaria interna y figura clave en la investidura de 2018, cayó en desgracia con la remodelación ministerial de 2021 y fue perdiendo peso político hasta quedar fuera de la dirección. El caso Koldo ha supuesto el golpe definitivo.
Cabe recordar que Ábalos no está investigado judicialmente, pero el PSOE considera que su responsabilidad política como superior jerárquico de Koldo García lo inhabilita como representante del partido. La negativa del exministro a abandonar su escaño tensionó la relación con Ferraz, que finalmente optó por la vía disciplinaria.
El caso Koldo investiga el presunto amaño de contratos para la compra de mascarillas durante la pandemia, con comisiones millonarias y una trama de influencias que salpica a varios exasesores del Gobierno. Aunque Ábalos ha negado cualquier implicación, su vinculación al nombramiento de Koldo García ha sido suficiente para que el partido cierre filas y marque distancia definitiva.