Hoy: 23 de diciembre de 2024
La presidenta de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), Juana Carretero, recalca la necesidad de considerar la obesidad como una enfermedad crónica, recidivante y de origen múltiple. En este sentido, médicos internistas han afirmado que la obesidad debe reconocerse como enfermedad crónica “cuanto antes” y tener un proceso asistencial “claramente definido” para atender a los pacientes.
Hasta ahora, se había postulado que la obesidad es un factor de riesgo para otras enfermedades y que existe el fenotipo obeso metabólicamente sano (FOMS), según el cual hay personas obesas sanas que no tienen más riesgo de desarrollar otras enfermedades. Sin embargo, ahora los expertos sostienen que la grasa corporal, aun sin manifestaciones evidentes, posee características disfuncionales y puede causar inflamación y enfermedad.
Los expertos apuntan a que las personas con obesidad pueden desarrollar enfermedades metabólicas, cardiovasculares, apnea del sueño, enfermedad renal, diversos tipos de cáncer, entre otros problemas de salud. La presidenta de SEMI recalca que la conciencia sobre los riesgos asociados a la obesidad debe mejorarse, evitando estigmatizar a quienes la padecen y promoviendo un enfoque médico y asistencial compasivo y definido.
Los especialistas abogan por medidas preventivas desde la infancia, como la educación para la salud en colegios, entornos urbanos saludables y promoción de la Dieta Mediterránea. La obesidad general es más prevalente en varones y la obesidad abdominal lo es más en mujeres. Ambos tipos de obesidad aumentan con la edad, sobre todo a partir de los 65-70 años.
La normalización del exceso de peso en los jóvenes y la falta de conciencia sobre los riesgos asociados a la obesidad también son discutidos y los expertos destacan la importancia de una percepción adecuada del peso como parte de la salud en lugar de una mera cuestión estética.