La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha concluido que el exsecretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, actuaba como “enlace” entre el Ministerio de Transportes y Acciona en una presunta trama de adjudicaciones públicas amañadas. Así lo recoge un informe al que ha tenido acceso Europa Press y que ha sido entregado al Tribunal Supremo, que incluye imágenes de reuniones entre Cerdán y el exdirectivo de Acciona Justo Vicente Pelegrini, actualmente imputado en el caso Koldo. Estos encuentros, según el documento, tuvieron lugar en 2019 en un piso alquilado por Joseba Antxon Alonso, socio de Cerdán en la empresa Servinabar 2.000.
La UCO destaca que Servinabar, participada por Cerdán en un 45%, obtuvo el 75,33% de sus ingresos gracias a su vínculo con Acciona entre 2015 y 2020, una cifra que alcanza los 6,7 millones de euros. Tras los registros efectuados en domicilios y empresas, los investigadores afirman haber encontrado nueva documentación que relaciona al político con la red, supuestamente liderada por Cerdán, José Luis Ábalos y Koldo García.
El informe subraya que Antxon Alonso alquiló en 2019 un piso en la madrileña calle Fuencarral que “pudiera haber sido empleado para mantener reuniones y no como eventual domicilio”. Las fotografías extraídas del teléfono móvil de Alonso muestran a Cerdán y “quien parece ser Justo” Vicente Pelegrini reunidos tanto en el apartamento como en un bar cercano. La UCO también señala que en las imágenes aparecen documentos sobre la mesa y recuerda que en esas mismas fechas “se estaban dirimiendo” adjudicaciones en Logroño, Sevilla y Sant Feliú de Llobregat.
La relación entre ambos directivos no se limitó a 2019. La Guardia Civil ha hallado anotaciones en el calendario de Alonso que demuestran que los contactos continuaron, como “cena Santi/Justo” en septiembre de 2020 o “café con Justo/Santi 19.00” en mayo de 2021. Estos datos refuerzan la tesis de que los encuentros tenían continuidad y estaban ligados a la presunta operativa conjunta.
En su análisis, la UCO detalla cómo Acciona y Servinabar colaboraban para acceder a contratos públicos, señalando “indicios” de “una operativa común” mediante la cual la constructora contrataba a Servinabar para ejecutar trabajos en obras adjudicadas por el Ministerio de Transportes. Antes de la resolución de los concursos, ambas compañías firmaban un “compromiso de colaboración previo”, lo que, en palabras de la Guardia Civil, situaba a Servinabar en una posición privilegiada dentro del reparto económico.
Los investigadores destacan que Servinabar solía recibir un porcentaje fijo de los contratos: “En el resto de los casos, las partes acordaban directamente que los honorarios a percibir por los servicios ascendiesen al 2% del total adjudicado a la constructora”. Este modelo permitió que la empresa obtenida por Cerdán y Alonso concentrara el 75% de sus ingresos globales en trabajos vinculados directa o indirectamente a Acciona, sumando casi nueve millones de euros, según las cifras recopiladas por la UCO.