Hoy: 23 de noviembre de 2024
El Vaticano se ofreció para acoger a Aung San Suu Kyi, la líder encarcelada de Birmania, según ha revelado el Papa Francisco en una conversación privada con los jesuitas de la provincia de Indonesia.
“Fui a Myanmar y hablé allí con la señora Aung San Suu Kyi, que fue primera ministra y ahora está en prisión. Pedí la liberación de la señora Aung San Suu Kyi y recibí a su hijo en Roma. Ofrecí al Vaticano recibirla en nuestro territorio”, dijo Francisco durante las conversaciones que mantuvo en privado con los jesuitas de Indonesia, Timor Oriental y Singapur durante su último viaje, y que han sido adelantadas por el periódico ‘Il Corriere della Sera’.
Francisco habla así de su compromiso para lograr la liberación de Aung San Suu Kyi, la primera ministra de Myanmar que se encuentra en prisión desde que se perpetrara un golpe de Estado de la Junta militar en el país, en febrero de 2021.
“En Myanmar hoy no se puede permanecer en silencio: ¡hay que hacer algo!. El futuro de vuestro país debe ser la paz basada en el respeto de la dignidad y de los derechos de todos, en el respeto de un orden democrático que permita a todos aportar su contribución al bien común”, indicó el Papa.
En la conversación, Francisco también reveló que se levanta temprano “porque soy viejo”. “Después del descanso, que me hace bien, me levanto hacia las 4, luego a las 5 empiezo la oración: rezo el breviario y hablo con el Señor. Si la oración es un poco, digamos, ‘aburrida’, entonces rezo el rosario. Después voy a Palacio para las audiencias. Después almuerzo y descanso un poco. A veces rezo en silencio ante el Señor. Rezo, celebro la Eucaristía, por supuesto”, relata.
En este punto, el Pontífice reconoce: “A veces me duermo en oración. Y esto, cuando sucede, no es un problema: ¡para mí es un signo de que estoy bien con el Señor!”. “Descanso rezando. ¡No dejes nunca la oración!”, concluye.