La Policía de Zimbabue ha informado sobre el arresto de un individuo que se autodenominaba «profeta» de una secta religiosa en un complejo donde las autoridades han encontrado tumbas y han liberado a más de 250 niños utilizados como mano de obra barata.
Los agentes de la Policía han confirmado la detención de Ishmael Chokurongerwa Madzibaba Ishmael, de 56 años, líder de la iglesia africana Johane Masowe, junto a otras siete personas vinculadas a la secta, «por actividades delictivas que incluyen abuso infantil». El arresto tuvo lugar tras una redada en la granja de la secta ubicada en Nyabira, al norte de Zimbabue.
Durante la operación, se encontraros a 251 niños, de los cuales 246 no tenían certificado de nacimiento y la secta los explotaba «para realizar diversas actividades físicas en beneficio del liderazgo».
Los menores en edad escolar no asistían a la educación formal y la secta los sometía a abusos como mano de obra barata, haciéndolos trabajar bajo el pretexto de adquirir habilidades para la vida.
Además, se descubrieron 16 tumbas en el complejo, nueve de adultos y siete de niños. La Policía zimbabuense señaló que «todos los entierros se llevaron a cabo sin registro previo (…) o sin obtener órdenes de entierro» de acuerdo con la ley vigente.