Hoy: 29 de noviembre de 2024
El director del Instituto de Psiquiatría y Salud Mental del Hospital General Universitario Gregorio Marañón, el Dr. Celso Arango, ha lanzado una advertencia sobre la esquizofrenia destacando que hasta un 10-15% de las personas experimentan los primeros síntomas antes de los 18 años, con características diferentes a las observadas en adultos. El especialista destaca que el pronóstico y la respuesta al tratamiento son menos favorables en estos casos, señalando la necesidad de una atención más temprana y específica.
En el caso de los adolescentes, Arango destaca que las alucinaciones auditivas son más frecuentes, los delirios son menos estructurados, y existe una mayor desorganización conceptual. El pronóstico de la esquizofrenia es más desafiante cuando se manifiesta temprano, lo que subraya la importancia de la intervención temprana y la adaptación de tratamientos psicoterapéuticos y farmacológicos.
La psiquiatría de precisión, según Arango, ya cuenta con indicadores que permiten evaluar el riesgo de desarrollar psicosis o esquizofrenia, considerando variables como sexo, edad, antecedentes familiares, consumo de cannabis y experiencias traumáticas. Según el experto, el próximo paso implica avanzar hacia un tratamiento personalizado, basado en la comprensión de las diversas causas del síndrome de las esquizofrenias.
El encuentro de profesionales Meet The Expert, organizado por la Alianza Otsuka-Lundbeck, destaca la necesidad de recursos específicos para abordar la esquizofrenia en adolescentes. Se enfatiza la importancia de contar con entornos comunitarios centrados en aspectos sociales y de ocio, proporcionando servicios médicos, psicológicos y de enfermería. Este enfoque, implementado en varios países, busca mejorar la calidad de vida y la respuesta al tratamiento.
En el contexto de la atención clínica, los expertos también discuten la relevancia de adaptar los tratamientos según el género. La Dra. Benedicto Crespo-Facorro destaca las diferencias en la sintomatología y el pronóstico de la esquizofrenia en hombres y mujeres. Además, resalta la importancia de considerar el impacto diferencial de los tratamientos, como los antipsicóticos, en función del sexo.
El diagnóstico temprano de trastornos psicóticos en la etapa infantojuvenil se vuelve crucial, según Crespo-Facorro, quien subraya la necesidad de diferenciar los síntomas psicóticos de otras alteraciones de conducta en estas edades. En el caso de mujeres con esquizofrenia, se destaca el mayor riesgo de recaídas durante el embarazo y el puerperio, enfatizando la importancia de una atención especializada durante estos periodos.
En conclusión, la alerta de los expertos destaca la necesidad de una mayor conciencia y atención específica para abordar la esquizofrenia en distintos grupos de edad y género. La personalización de tratamientos y la intervención temprana desempeñan un papel crucial en la mejora de la calidad de vida y el pronóstico de las personas afectadas por esta compleja enfermedad mental.