Hoy: 23 de noviembre de 2024
La protesta de agricultores y ganaderos iniciada ayer en Santander ha vuelto a cortar en la mañana de este sábado la calle Calvo Sotelo del centro de la capital, por donde han marchado de nuevo una treintena de tractores de los manifestantes que han hecho noche frente a la Delegación del Gobierno en Cantabria.
Allí, los tractoristas han hecho sonar sus bocinas durante toda la mañana acompañados por decenas de personas que han marchado a pie con campanos, algunos con chalecos amarillos. Antes de dejar Santander casi a la una del mediodía, tras cortar el tráfico durante cerca de dos horas acompañados por la Policía, los manifestantes han vuelto a dejar patentes las reivindicaciones del campo y para ello han depositado ante la puerta de la sede de la Delegación el cadáver de un potro atacado anoche por el lobo en Campoo, mientras su dueño estaba en la protesta, según han contado.
Junto a ese cadáver han colocado otro que llevaban ya ayer en la manifestación en la parte delantera de uno de los tractores acompañado de una pancarta con la inscripción Día sí y día también, en alusión a los daños que los lobos causan a sus cabañas, y para reivindicar ante el Gobierno que éstos salgan del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Especial Protección (Lespre).
Junto a los restos de estos animales fallecidos han escenificado un minuto de silencio por las reses víctimas de los ataques de lobo y han rezado un Padre Nuestro, retirando después los cadáveres para continuar su marcha.
Poco antes de llegar a la rotonda del Paseo Pereda, por donde han girado para entrar al túnel del Centro Botín y dejar la ciudad, los tractoristas que han pasado la noche frente a la Delegación han bajado de sus vehículos uno a uno para escribir sus nombres en la calzada con spray.
Lo han hecho mientras varios compañeros de los que participaban a pie les hacían un pasillo haciendo sonar los campanos, al tiempo que ciudadanos agrupados en las aceras para contemplar el acto les aplaudían.
De este modo han dado por terminada una movilización que, convocada por las organizaciones profesionales agrarias (OPAs) UGAM-COAG, ASAJA, UPA y AIGAS-La Unión, junto a las cooperativas y asociaciones, arrancó ayer con una tractorada en la que participaron unos 300 vehículos y un millar de personas.
No obstante, ya tienen la vista puesta en la próxima protesta, convocada conjuntamente en toda la cornisa cantábrica para el martes, día 20, y que será diferente a ésta, ya que según han avanzado en esta ocasión se producirán cortes en los límites de las comunidades autónomas: Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco.
Una nueva convocatoria que llegará apenas tres días después del despliegue de este viernes y sábado, ya que la cita no acabó cuando estaba previsto. Y es que, tras llegar la movilización de ayer a su destino, la Delegación, un grupo de ganaderos decidió extenderla quedándose toda la tarde y la noche.
Así lo hicieron cerca de un centenar y 35 tractores que han permanecido aparcados en Calvo Sotelo hasta que se ha retomado la actividad por la mañana, con una protesta par ala que no habían solicitado permiso a la Delegación.
Algunos de ellos han dormido en sus tractores y otros “al raso” en una noche fría en la Plaza Alfonso XIII, donde han colocado mesas y sillas, han compartido tertulias y han hecho una hoguera para calentarse.
De esta guisa han podido echar “una cabezada” después de un día “largo y muy emocionante” como el de ayer, en el que trasladaron a la ciudad las reivindicaciones del campo, la mayoría dirigidas a Europa y que consisten en precios justos para sus productos y menos exigencias para producir, además de que se elimine la protección del lobo para poder hacer extracciones y que se reduzcan los ataques, porque como lamentan en algunas zonas de Cantabria “es casi imposible practicar la ganadería extensiva”.
Entre los que han pernoctado en la capital está el secretario general de UGAM-COAG, Luis Pérez Portilla, que en nombre del sector ha dado las gracias esta mañana a los cántabros que acudieron ayer a apoyar la convocatoria. “Hemos sentido mucho cariño, nos han apoyado mucho y nos han animado a seguir con las movilizaciones”, ha dicho a los medios.
En la misma línea, su homólogo en ASAJA, Raúl Villarón, ha reiterado que las OPAs continúan su calendario de protestas, no contentos con la reunión del sector tuvo esta semana con el ministro Luis Planas, pues “ninguna de las medidas que ha puesto sobre la mesa nos afecta en el día a día de la explotación”.
Además, ha insistido en la necesaria flexibilización de la Política Agraria Comunitaria (PAC) y de unos planes que “no se adaptan para nada a la realidad de la cornisa cantábrica” porque están pensadas “para otro tipo de explotaciones y de terrenos”.