La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha anunciado la ampliación del permiso por fallecimiento hasta 10 días y la creación de un nuevo permiso retribuido para cuidados paliativos. Estas medidas, ha explicado, buscan adaptar el mercado laboral a las realidades personales y familiares de los trabajadores. “Nadie puede trabajar bien a los dos días de fallecer un ser querido”, subrayó.
Durante su intervención, la ministra denunció que “uno de los problemas de España respecto a la productividad es que se obliga a la gente a trabajar en condiciones que no son favorables”. Añadió que “ningún padre o madre puede trabajar como si nada cuando su hija está en paliativos”, destacando la importancia de cuidar la salud mental y emocional de los empleados. Para Díaz, la productividad no debe medirse solo en términos económicos, sino también en bienestar social.
La titular de Trabajo también quiso desmontar ciertos discursos sobre el absentismo laboral. “El que entierra a una madre o que no acude al trabajo porque tiene que cuidar a su hijo no es un absentista”, recalcó. A su juicio, “el absentismo de verdad, claro que es un problema en España”, pero insistió en que debe abordarse desde el rigor, recordando que su impacto económico equivale a un punto y medio del PIB.
En materia de reforma laboral, Díaz adelantó que el 20 de octubre convocará a sindicatos y empresarios para iniciar la negociación sobre una nueva reforma del despido. Explicó que el debate no se centrará en el número de días de indemnización, sino en redefinir la lógica del sistema. La ministra propone que la compensación se base en los criterios de “daño emergente y lucro cesante”, considerando factores como la edad o la empleabilidad del trabajador.
Por último, Díaz se refirió a la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) y expresó su deseo de alcanzar un acuerdo con la CEOE, pese a que la patronal no ha participado en los últimos cinco años. Aseguró que prefiere un pacto “aunque implique una subida más moderada, antes que una mayor sin consenso”. Con estas medidas, el Ministerio de Trabajo busca consolidar un modelo laboral más equitativo, empático y adaptado a las necesidades reales de la ciudadanía.