Hoy: 23 de noviembre de 2024
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) ha denunciado este martes que la Franja de Gaza se ha convertido a día de hoy en el “lugar más peligroso del mundo para ser niño o niña” a medida que avanza la ofensiva del Ejército de Israel contra el enclave palestino, donde se han registrado ya más de 19.600 muertos.
El portavoz de Unicef, James Elder, ha indicado en declaraciones desde la sede de la organización en Ginebra que la “brutal realidad” de la población civil en la zona “se consolida” a medida que avanza el conflicto.
Elder, que ha incidido en que el hospital Al Nasser, en Jan Yunis, ha sido bombardeado en dos ocasiones durante las últimas 48 horas, ha lamentado que este centro “no solo alberga un gran número de niños y niñas que ya habían resultado heridos en ataques contra sus viviendas sino también a cientos de mujeres y niños que buscaban seguridad”.
“¿Dónde van a ir los niños y sus familias? No están seguros en los hospitales. No están seguros en los refugios. Y, desde luego, no están seguros en las llamadas ‘zonas seguras'”, ha matizado antes de explicar que dichas áreas carecen de garantías de seguridad dado que son establecidas de forma “unilateral” por las fuerzas israelíes.
En este sentido, ha recalcado que la ONU ya hizo este apunte hace aproximadamente un mes: “estas zonas no pueden ser seguras o humanitarias si se declaran unilateralmente”. “Bajo el Derecho Internacional Humanitario, el lugar al que se evacúa a la gente debe tener suficientes recursos para sobrevivir: instalaciones médicas, alimento y agua”, ha dicho.
Asimismo, ha matizado que estas áreas solo son seguras “cuando están libres de bombardeos y se cumplen estas condiciones”. “Bajo las actuales condiciones de asedio es imposible que estas zonas cuenten con suministros adecuados. Yo mismo he visto esta realidad”, ha continuado.
Elder ha manifestado que estas zonas son “pequeñas parcelas de tierra estéril, esquinas de calles o edificios a medio construir, sin agua, sin instalaciones, sin refugio contra el frío y la lluvia. Y sin saneamiento, algo de vital importancia”.
Datos de la ONU apuntan a que actualmente hay en Gaza una media de un retrete por cada 700 niños y familias. “Reubicar a familias en lugares donde no hay retretes es obligar a decenas de miles de personas a recurrir a cubos o a la defecación al aire libre”, ha alertado antes de sostener que “Sin agua, saneamiento o refugio estas zonas son zonas de enfermedad”.
“Los casos de diarrea entre los niños y niñas superan los 100.000. Los de enfermedades respiratorias agudas entre los adultos están por encima de los 150.000. Ambas cifras serán muy inferiores a la lamentable realidad. Con la desnutrición aumentando entre los niños y niñas de Gaza, las enfermedades diarreicas se convierten en mortales”, ha afirmado.
Elder ha apuntado además que “en este escenario, sin el agua, el alimento y el saneamiento que solo un alto el fuego humanitario puede traer, las muertes infantiles debidas a enfermedades podrían sobrepasar a las víctimas de bombardeos”, algo de lo que “los padres son dolorosamente conscientes”.
“Los hospitales no son una opción para sus hijos enfermos porque son objetivo de ataques y porque están saturados con niños y ciudadanos con espantosas heridas de guerra”, ha declarado antes de subrayar que “la distribución de ayuda es una cuestión de vida o muerte para los niños y niñas de Gaza”.
“No se están cumpliendo las condiciones para proporcionar esa ayuda. Un alto el fuego humanitario inmediato y duradero es la única manera de acabar con las muertes y heridas de niños, y con las muertes infantiles causadas por enfermedades; es también la única manera de garantizar la distribución urgente de la ayuda vital que se necesita desesperadamente”, ha zanjado.