Hoy: 24 de noviembre de 2024
Esta historia empieza como la canción de Rosario Flores, Que bonito sería.
Jamás, en ningún lugar del mundo, existió mayor demostración de amor de un hombre a una mujer como la que hemos conocido y ha ocurrido en un país que estaba perdiendo los colores desde que algunos tenemos memoria.
De pronto, ha sido una explosión de fuegos artificiales, ilusión, felicidad y esperanza en un mundo feliz.
Los colores han brotado con tal fuerza que surgen con gran parafernalia de servilismo, admiración y súplica, para pedir que no nos deje este enamorado solos ante el desamor.
Y llegamos a esta conclusión: La mayor entrega que existe, siendo verdadera, es dejar “todo” por amor, en este caso hacia una mujer que ha sido manejada por ese que aho, al salir a la luz un mal juego, le declara todo ese inmenso sentimiento, con una pasión casi desenfrenada y la expone sin ningún pudor.
¿No será al contrario? Quien le ha mostrado su amor y pasión, toda su entrega personal, en cuerpo y alma, casi con un sentimiento de posesión y fuera de control, ha sido la persona que por él ha hecho todo.
Ella, esa mujer que por mantenerlo en su atalaya y que no cayera ante los ojos de todos, se ha convertido en la auténtica víctima de ese “enamorado” que la ha usado sin medida. Y cuando se dio cuenta de que el agua le estaba llegando al cuello, hizo un gesto que creyó sería fulminante y declaró ante todos cuanto la amaba, aunque estoy segura que hubiera continuado sirviéndose de ella.
Como en muchísimas ocasiones, una mujer ha sido participe de los juegos de un hombre por mantenerlo con su ego creciente y sin fin.
Pero estar todos seguros, en muchos, su engreimiento les puede llevar al caos más estrepitoso, y en estas historias, ellas caen las primeras junto a ellos.
¿Qué os creiáis? ¿Que nos habían salvado esos grupos que se presentaban como nuestras salvadoras?
Si de verdad funcionase el amor desinteresado, esta sí sería una grandísima y hermosa historia de AMOR con mayúscula.
¡Qué no nos cuentes milongas, caramba!
¡Ya está bien!
Una gran historia de amor?? Estos son todos iguales, una mujer manipulada o una compañera de sus trapiches?
Ya no creo a ninguno, ni tan siquiera el macho de la manada me ha engañado, ahora resulta que es un dramático, muy malo, nadie se lo ha creído.
Que pandilla, mañana seguiremos viendo más teatro, todo orquestado por un tipo que se ha permitido tomarse cuatro días libres sin importarle para nada los problemas graves que nos afectan.
Dos que duermen en el mismo colchón son de igual condición Con esto todo dicho aunque me gustaría poder añadir un “ hasta luego Mari Carmen “
Yo creo firmemente que este hombre vive profundamente enamorado, pero de sí mismo.