Un 21,1% de los encuestados sostiene que siente dolor generalizado y un 19% lo sufre en la espalda
Un estudio reciente, titulado Barómetro del dolor crónico asociado a la migraña. Análisis de situación de su impacto en España y realizado por la Fundación Grünenthal y el Observatorio del Dolor de la Universidad de Cádiz, ha revelado que el 31,5% de los pacientes con dolor crónico padecen migraña.
El informe, avalado por la Asociación Española de Migraña y Cefalea (AEMICE), subraya que esta dolencia es especialmente prevalente en mujeres, con un 37% de casos frente al 23% en hombres.
El barómetro indica que la migraña y el dolor crónico afectan de forma significativa a la población más joven. De los pacientes estudiados, un 48% tiene entre 18 y 34 años, mientras que un 36,2% se encuentra entre los 35 y 54 años. Solo un 5,4% de los casos corresponde a personas de entre 76 y 85 años.
El dolor se localiza principalmente en la cabeza en el 24,9% de los pacientes. No obstante, un 21,1% reporta dolor generalizado y un 19% lo sufre en la espalda, extremidades o articulaciones. Además, un 62,5% de los afectados describe su dolor como “intenso”, con puntuaciones de 7 a 9 en la escala de intensidad, y un 8,2% lo considera “insoportable”.
Impacto en la calidad de vida y sueño
La migraña y el dolor crónico tienen un impacto directo en la calidad de vida, afectando a la capacidad para llevar una rutina normal. De hecho, el 80% de los pacientes con esta patología experimentan trastornos del sueño debido al dolor.
“Los datos muestran la alta prevalencia de la migraña entre los pacientes con dolor crónico y su considerable impacto en su calidad de vida. Conocer estos datos es esencial para desarrollar medidas que aumenten la concienciación y mejoren su abordaje”, comentó Ana Esquivias, patrona de la Fundación Grünenthal.
Por su parte, Isabel Colomina, presidenta de AEMICE, enfatizó la gravedad de esta afección al señalar que “la migraña es una enfermedad neurológica incapacitante, que muchas veces obliga a detener la actividad diaria durante horas o incluso días. Es necesaria una mayor conciencia social para combatir el estigma que la rodea”.