El saludo y las sonrisas durante 12 segundos entre Donald Trump y el presidente español, Pedro Sánchez, durante la firma del tratado de paz para Gaza, ha sido un espejismo. La falsa cordialidad de Trump con Sánchez ha durado eol tiem,po justo que ha necesitado para regresar a la CasaBlanca y allí, en la primera oportunidad que ha tenido, hay vuelto a atacar a España en lo que empieza a ser una obsesión enfermiza.
El presidente de Estados Unidos ha amenazado con imponer sanciones a España por las discrepancias sobre el objetivo de gasto militar del 5% del PIB acordado en la cumbre de líderes aliados de La Haya, y lo hace días después de que después de que haya sugerido expulsar a España de la OTAN por su rechazo a invertir más en seguridad.
La agresiva reacción de Trump llega después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, haya insistido este martes durante una entrevista en la Cadena Ser en su negativa a elevar hasta el 5% del PIB el gasto en defensa.
«Creo que es una gran falta de respeto a la OTAN. De hecho, estaba pensando en castigarlos comercialmente con aranceles por lo que hicieron. Y podría hacerlo. Me parece increíblemente irrespetuoso», ha dicho en declaraciones a la prensa durante una reunión de su gabinete con el presidente de Argentina, Javier Milei.
«España (ha sido el) único país de la OTAN, el único del planeta en hacer eso. Y creo que deberían ser castigados por eso», ha remarcado el inquilino de la Casa Blanca, que lamenta tener que protegernos incluso si no quiere por la ubicación de la península.
En su crónica para El Mundo, Pablo Suances señala desde Washington que el presidente norteamericano se ha mostrado “muy descontento con España” durante una reunión en la Casa Blanca con el argentino Milei.
En respuesta a una pregunta de los periodistas, Trump ha vuelto a arremeter contra la posición española acerca del gasto militar. La actitud de España “es muy poco respetuosa” hacia el resto de miembros de la Alianza, ha considerado el republicano, recoge Macarena Vidal en El País. Y añade: “A España le va muy bien… recibe protección aunque tú no quieras dársela, porque ¿qué van a hacer los otros países? No pueden negársela en caso de ataque», ha señalado. El republicano ha insistido en que “lo que hicieron no es muy justo hacia otros países”, al rechazar elevar su inversión en Defensa al 5%.
La irritación del presidente estadounidense con el Gobierno de Pedro Sánchez y su posición respecto al gasto militar viene de lejos. Ya durante la campaña presidencial había declarado en varias ocasiones que se planteaba no respetar el Artículo 5 del tratado fundacional de la Alianza —que obliga a los países miembros a acudir en defensa de cualquiera de los socios que resulte atacado por un enemigo externo— si fuera atacado un Estado que no cumpliera las metas de inversión en Defensa, entonces del 2%, añade Vidal.
Ebn su entrevista Sánchez asegura su encuentro con Trump «fue un intercambio muy cordial (…). He tenido ocasión, ya en su primera administración en el año 2018 y 2019, de tener reuniones y de tener encuentros», añadiendo que le trasladó que España está comprometida con la seguridad de la OTAN y que con el 2,1% del PIB considera que da una «respuesta sobrada» a las capacidades que solicita la Alianza Atlántica.
«Ellos reconocen el crecimiento económico que tiene España y la buena marcha de la economía española. Yo le he dicho muy claramente siempre que nosotros estamos comprometidos con la defensa con la seguridad de la alianza y al mismo tiempo estamos igual de comprometidos con la defensa de nuestro estado del bienestar», ha añadido.
Preguntado sobre qué quiso decir Trump durante la cumbre de este lunes en Egipto cuando al referirse a España dijo «nos estamos acercando», Sánchez ha defendido que las relaciones entre Estados Unidos y España son «muy buenas», «más allá» de la «evidente discrepancia» que pueden tener ambos países «en muchas políticas».
«Yo creo que las relaciones entre EE UU y España son muy positivas y muy profundas están muy consolidadas», ha ahondado, para después recordar que Estados Unidos «es el segundo país de inversión española fuera de nuestras fronteras» y que, a diferencia de otros países, el nuestro sufre «un déficit comercial» con Washington, y no al revés.