Hoy: 23 de noviembre de 2024
Toni Kroos ha sido fundamental para la Alemania en el inicio de la Eurocopa, ya que el país ha ganado los dos primeros partidos gracias a un juego basado en el control y la posesión del balón, habilidades que destacan al centrocampista.
La victoria de la anfitriona en los dos partidos podría parecer algo razonable, pero no es así. Cuando Toni Kroos anunció su regreso a la selección alemana en febrero, Alemania se encontró en medio de una crisis de resultados.
La Mannschaft encadenaba dos derrotas consecutivas y tres partidos seguidos sin ganar, todos ellos ante combinados, a priori, de menor nivel como Austria (2-0), Turquía (2-3) y México (2-2).
Malos resultados que no hacían más que acentuar su mal papel en las últimas fases finales de grandes torneos, que supusieron las prematuras eliminaciones en la primera fase del Mundial de Catar y Rusia, así como en los octavos de final de la Eurocopa 2020. Sin embargo, la inercia parece haber cambiado en este Europeo, en el que, a falta de una jornada, ya han conseguido el pase a los cruces dejando muy buenas sensaciones.
Unos resultados y buen juego que tienen como principal protagonista a Toni Kroos. Desde que el seis veces campeón de la Champions ha vuelto a vestir la camiseta de Alemania, los germanos no han perdido ni un solo encuentro, consiguiendo cinco victorias –Francia, Países Bajos, Grecia, Escocia y Hungría– y un empate ante Ucrania. Así, la vuelta de Kroos a la selección ha supuesto que Nagelsmann pase de un 25% de victorias y dos derrotas sin el centrocampista a un 83% de triunfos y ninguna derrota con él sobre el césped.
Una dependencia de Kroos que, más allá de resultados, se ve manifestada en el modelo de juego. Con el mediocentro, el estilo del combinado germano es mucho más dominante a través de la posesión y con mayor capacidad para encontrar espacios ante defensas muy replegadas. Por supuesto, el nivel de acierto en el pase de Alemania se ha visto incrementado, por lo que son un equipo que comete menos errores y concede menos contragolpes al rival.
En términos individuales, Toni Kroos, que se retirará al finalizar el torneo, está brillando. El ‘8’ de Alemania ha participado de titular en los dos primeros partidos de la Euro, descansando tan solo 10 de los 180 minutos disputados. Suma 170 minutos de juego en los que está siendo el jugador de su equipo que más pases ha intentado (233) y completado (226), teniendo un porcentaje de acierto del 97%. Además, ha realizado 14 centros y generado cinco ocasiones.
La vuelta de Kroos a la Mannschaft también ha aportado mayores variantes tácticas a Nagelsmann, ya que ha permitido que Ilkay Gündogan pueda desentenderse de la creación de juego, teniendo una posición mucho más cercana al área, donde puede lucir su último pase y definición –un gol y una asistencia en la EURO–. Además, Kroos permite que un centrocampista mucho más posicional y defensivo como Andrich se libere de la creación, uno de los puntos débiles de el del Leverkusen.
En definitiva, Kroos, más allá de volver a demostrar que es uno de los mejores centrocampistas del mundo, ha dado un lavado de cara a una Alemania que deambulaba tras el Mundial de Catar y que ahora está entre los grandes favoritos y las selecciones que mejor fútbol practican en su Eurocopa.