Una imagen deleznable por la cual la directiva de Concha Espina no se ha pronunciado, ni ha condenado lo sucedido, como sí hizo el club rojiblanco con el muñeco del brasileño.
Los Ultra Sur del Real Madrid pasearon por los aledaños del Bernabéu con motivo del derbi, que disputaron en Copa del Rey el equipo blanco y el Atlético de Madrid, una gran pancarta en la que aparecía la imagen de Ana Frank —la niña judía que falleció en el Holocausto nazi— vestida con una camiseta luciendo el logo del Frente Atlético, bajo el título: “Ana Frank es del Atleti”.
Una imagen dantesca que atenta contra la historia de la humanidad, teniendo en cuenta que la joven Ana Frank falleció en un campo de exterminio tras ocultarse del ejército de Hitler durante dos años en la Casa de Atrás,
Coincidiendo con el 77 aniversario de la liberación del Holocausto, la imagen de Ana Frank no ha sido condenada ni ha tenido la repercusión en redes y en los medios como el muñeco con la camiseta de Vinicius Jr., que apareció colgado de un puente en la M30, y cuya autoría se desconoce, aunque señalan al sector radical del equipo rojiblanco. Una imagen deleznable por la cual la directiva de Concha Espina no se ha pronunciado, ni ha condenado lo sucedido, como sí hizo el club rojiblanco con el muñeco del brasileño.
Todo ello sumado a los cánticos que los Ultra Sur le dedican a ‘El Cholo’ Simeone desde que este se convirtiese en entrenador del Atleti, allá por el 2011: “Olé, olé, olé, cornudo Simeone” y que tampoco han sido condenados por los medios de comunicación, ni por la directiva del equipo de Florentino Pérez, ni tienen tanta repercusión en las redes sociales.
Gil Marín estalla
Por su parte Miguel Ángel Gil Marín, consejero delegado del Atlético, ha cargado contra el estamento arbitral tras el polémico arbitraje realizado por Soto Grado durante el derbi, donde los rojiblancos cayeron eliminados 3-1.
“La segunda amarilla (a Ceballos) era obvia, ajustada a reglamento. Pero con 0-1, en el minuto 71, jugándose el pase para semifinales de Copa en su propio estadio, dejar al Madrid con 10 jugadores son palabras mayores“, apunta sin tapujos el máximo accionista de la entidad rojiblanca.
Aún así, Gil Marín afirma lo siguiente: “Tengo un respeto máximo por el colectivo arbitral, y estoy convencido de que su intención es siempre la mejor, pero cualquiera, que lo observe desde fuera, puede ver que desde hace décadas casi siempre ocurre lo mismo. Por desgracia ya no sorprende a nadie, no es noticia. Es algo muy evidente“, relata.
Unas declaraciones publicadas en la web del Atlético de Madrid en las que Gil Marín ataca con dureza al conjunto blanco, algo inusual en él desde que está al frente del club.
“El Madrid es un club con un entorno muy fuerte, con muchos intereses a su alrededor. Crean tal presión que es normal que afecte a las personas que deben tomar decisiones. Son conscientes de lo que les espera si les perjudican con algún error o con algún acierto. Es habitual la campaña contra quien consideran que les perjudica”, afirma rotundamente.
“Si alguien perjudica al Madrid, sabe lo que le espera”
El consejero delegado del Atlético también señala la influencia que el equipo presidido por Florentino Pérez ejerce en los medios de comunicación: “Leemos páginas y páginas en prensa, horas de radio y televisión en los días previos a un derbi hablando de que hay que proteger a un jugador determinado de un equipo en concreto. Sinceramente, creo que a quien no se protegió fue a Griezmann o a Morata, por ejemplo, que les frieron a patadas, pero así es el sistema y nos hemos acostumbrado a él“, asevera.
“El sistema es así y desde el Atleti no podemos cambiarlo solos. Debemos competir hasta donde podamos y seguir trabajando para tener un sector más fuerte y más justo con todos los clubes. Ese estadio y el color de esa camiseta no deberían pesar a la hora de tomar decisiones justas. Nuestros jugadores sufrieron en el campo las consecuencias de toda esta presión y eso me indigna como a cualquier aficionado, sea del equipo que sea, que lo que espera es que haya una única vara de medir“, se lamenta.
Miguel Ángel Gil consciente de la repercusión de sus palabras, se muestra autocrítico: “Para que nadie dude: los responsables de dónde está el equipo somos nosotros, de no haber pasado de la fase de grupos de la Champions y de estar a 7 puntos del tercer clasificado en La Liga. Y de nosotros depende aprovechar los 20 partidos para cerrar la temporada lo más alto posible. Sin excusas, pero siendo conscientes de cómo funciona el sistema“
Finalmente, el máximo accionista rojiblanco confiesa lo siguiente: “Casi nunca hablo porque rápidamente te acusan de victimismo, pero quien de verdad conoce el ADN del Atlético de Madrid sabe que no nos gusta poner excusas”, sentencia.