El Parque de los Príncipes estalló de alegría. El PSG vuelve a una final de Champions cinco años después. Sin Mbappé, pero con carácter, velocidad y un Donnarumma que se agiganta en Europa, los parisinos se impusieron por 2-1 al Arsenal, sellando su pase a la gran cita de Múnich, donde les espera el Inter, según una información publicada en Europa Press.
El Arsenal arrancó con el cuchillo entre los dientes. Rice, Saka y compañía cercaron el área local en los primeros minutos, pero se toparon con una muralla llamada Donnarumma. Cuando el equipo de Arteta bajó una marcha, llegó el primer zarpazo: Fabián Ruiz, con su primer gol en Champions tras 46 partidos, puso el 1-0 con un latigazo tras jugada de estrategia. Fiesta española bajo la lluvia parisina.
Tras el descanso, el partido subió de revoluciones. El VAR detectó una mano de Lewis-Skelly y aunque Raya detuvo el penalti a Vitinha, el PSG no perdonó la siguiente: Hakimi fusiló el 2-0 tras un error en la salida del Arsenal. El 2-1 de Saka metió miedo, pero ya era tarde. Los de Luis Enrique aguantaron el empuje final con oficio y solvencia.
La imagen final lo decía todo: Luis Enrique abrazando a sus jugadores, liberado, feliz, en su segunda final de Champions como entrenador. El técnico asturiano, que el año pasado sopló velas amargas tras la eliminación ante el Dortmund, ahora celebra su 55º aniversario con el billete a Múnich en el bolsillo y un equipo que ha aprendido a competir sin estrellas, pero con fútbol, según afirma una información de La Prensa.
Lo del meta italiano ya no es casualidad. Salvo ante el Liverpool, el Aston Villa y ahora el Arsenal, Donnarumma ha sido decisivo en cada cruce. Tres paradas salvadoras en la vuelta lo confirman como el gran baluarte de este PSG más pragmático y menos dependiente del brillo individual.
PSG 2 (Fabián 27’, Hakimi 72’)
Arsenal 1 (Saka 76’)
Estadio: Parque de los Príncipes
Árbitro: Felix Zwayer (Alemania)
MVP: Gianluigi Donnarumma