El presidente de Colombia, Gustavo Petro, propuso “una revolución mundial” frente a la emergencia climática provocada por los combustibles fósiles, durante una conferencia en la capital mexicana, donde hizo una ironía sobre la participación indirecta de la presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, en la guerrilla del M-19.
“El M-19 ha producido dos presidentes en América Latina”, afirmó Petro, al recordar el movimiento insurgente del que formó parte en su juventud.
Además, el presidente colombiano recordó que “en su juventud temprana”, Sheinbaum “fue colaboradora y militante del M-19 en México”, un país que ofreció refugio a muchos guerrilleros perseguidos.
Durante su ponencia magistral Deuda por clima: la propuesta de Colombia, potencia de la vida para salvar el planeta, Petro sugirió que el “sur global” debería contrarrestar el modelo “neoliberal” del norte desde una perspectiva local, con un enfoque en la descarbonización.
Sin embargo, reconoció que Colombia es el quinto exportador de petróleo a nivel mundial y convocó a la región a discutir nuevas formas de generación de energía.
Asimismo, atribuyó el calentamiento global al hecho de que el capital está centrado en mantener el carbón y no presta atención a los científicos que advierten sobre la inminente crisis que podría resultar en la extinción de millones de especies para 2070.
“¿Entonces, qué le corresponde hacer a la humanidad hoy si el capital no da aviso, sino que niega la crisis climática y no la resuelve?”, planteó Petro.
“No hay otra opción. Lo dije en la ONU y es difícil que un presidente lo diga, pero a nosotros nos corresponde hacer una revolución mundial, a nadie más”, afirmó el mandatario colombiano, durante su charla ofrecida por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM.
Petro urgió a comenzar esta movilización desde lo local, sin olvidar que “los dueños del ejército son los dueños del capital”, el cual no dudarán en usar las armas por defender.
“Nos están mostrando los dientes, no solo a los palestinos, sino a todos los pueblos del mundo, porque nos están diciendo, miren, podemos destruirlos”, indicó respecto a la guerra en Gaza.
Además, reprobó que en Naciones Unidas reciban al primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, a quien llamó “prófugo de la justicia y genocida” por dar “la orden de asesinar a miles” de palestinos.
Petro acusó que parte de la humanidad está apostando por “el camino de la barbarie”, donde “importa un comino la extinción” por la crisis climática, y busca “seguir ganando y viviendo del petróleo, del carbón y de la riqueza que emite CO2”.
Según el presidente colombiano, este modelo está mandando el mensaje de que “aquí no van a destruir el capital, no va a haber cambio y si tiene que morir parte de la humanidad, que muera, que incluso aquí les estamos demostrando como si se atreven a rebelarse”.
Durante su charla, el mandatario colombiano también mencionó el estrés hídrico que amenaza a urbes como Bogotá o la Ciudad de México, e hizo un llamado a la comunidad internacional a “escuchar a los científicos” y no a los “dueños del capital” para resolver la problemática.
Petro cerró la ponencia recordando las relaciones de Sheinbaum con la guerrilla del M-19, “aunque haya a quienes no les guste esa historia”, y se apuró para dirigirse a una cena ofrecida este lunes por la noche por la presidenta electa de México con jefes de Estado, representantes de distintos país e invitados oficiales que asistirán a su investidura este martes 1 de octubre.