El protagonista de la película La Distancia muestra su lado más cercano y cariñoso con todas las personas que visitan su instalación gastronómica
Miguel Ángel Silvestre acudía hace unos días como invitado junto a Juan José Campanella a El Hormiguero para hablar de la segunda temporada de la serie de intriga en la que han trabajado juntos, Los enviados. Allí, el actor desveló cómo nació la idea de montar el restaurante que han inaugurado hace tan solo una semana junto a Marcos Llorente, Álex González y Antoine Griezmann.
Una noche cenando con Álex se encontró en el mismo restaurante con Llorente y Griezmann y allí se pusieron a hablar de lo que echaban de menos en un restaurante y que no existía en ninguno de los que habían visitado… así nació la idea de Rhudo.
“Yo dije: ¿A qué no ponemos un DJ en el baño? Y lo pusimos” le comentaba el actor a Pablo Motos sobre el nuevo local madrileño. Un exclusivo restaurante donde ya se ha visto a rostros conocidos disfrutar de una velada inimaginable.
Tan centrado está en este nuevo proyecto, que se ha podido ver como Miguel Ángel acudía una noche más a su restaurante mostrando su lado más cercano y cariñoso con todas las personas que se encontraban a las puertas.
Saludando a un chico que no dudó en hacer stories con el actor, Miguel Ángel lució la mejor de sus sonrisas ante los piropos del joven. Y también atendió a la prensa, confesando que se encuentra “muy bien y muy contento” ante este momento tan espléndido de su vida.