El expolítico ha explicado que padece un cáncer “galopante” y que lo único que quiere estar tranquilo con su familia
Después de más de dos semanas ingresado en una clínica de Málaga debido a un empeoramiento en su delicado estado de salud, Julián Muñoz recibió el alta hospitalaria el pasado 25 de marzo para continuar su tratamiento médico en la casa de su hija Eloísa, rodeado de toda su familia.
A pesar de la discreción con la que el exalcalde de Marbella ha optado por manejar su enfermedad, su círculo cercano reconocía que su estado era “grave” e “irreversible”, y varios colaboradores de televisión sugirieron que el tratamiento que estaba recibiendo sería paliativo, lo que generó una gran preocupación por su salud.
Asimismo, hasta ahora había evitado dejarse ver, Julián ha reaparecido públicamente y como han publicado varios medios de comunicación, ha salido a dar un paseo por los alrededores de su domicilio junto a su nieta y el novio de ésta, y a tomar el aperitivo con Fernando, pareja de su exmujer Mayte Zalvídar, con el que se lleva estupendamente.
Delgado y desmejorado
Una reaparición impactante, puesto que el “ex” de Isabel Pantoja, con chándal y una gorra, está mucho más delgado y desmejorado. Sin embargo, no ha perdido su buen humor y después de saludarles con una sonrisa, no dudó en sincerarse con los paparazzi, acabando con las especulaciones sobre su salud: “Tengo un cáncer galopante”, ha confesado muy afectado, asegurando que en estos momentos lo único que quiere es estar tranquilo y con su familia.
Emocionada a la hora de hablar del delicado estado de Julián, Mayte Zaldívar no ha querido pronunciarse sobre la enfermedad que ha hecho pública su exmarido, pero sí ha querido destacar su apoyo incondicional y el de su novio Fernando al expolítico en este durísimo trance: “Estamos todos con él, toda la familia nos llevamos bien y este momento tenemos que estar unidos. Hemos hecho una piña completamente”, ha reconocido.