El sindicato acusa al fiscal general del Estado de mostrar una actitud de pasividad y lo señala como cómplice de las acciones que considera ilícitas
El sindicato Manos Limpias ha anunciado la ampliación de la querella presentada ante la Sala Segunda del Tribunal Supremo contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el dirigente socialista Santos Cerdán. La organización acusa a ambos de delitos de extorsión y negociaciones prohibidas a funcionarios y autoridades, en relación con las conversaciones mantenidas con el expresidente catalán Carles Puigdemont.
Según la querella, la negociación llevada a cabo por Santos Cerdán con Puigdemont, bajo presunta extorsión, implicaría un delito en el que Cerdán actuaría como autor material y Sánchez como inductor. En concreto, la denuncia alude a presiones realizadas durante las negociaciones: “O cumples los acuerdos de investidura y legislatura o no apoyamos los Presupuestos Generales”, una supuesta amenaza que habría condicionado el respaldo de Junts al Gobierno central.
Manos Limpias señala también la actitud de inacción del fiscal general del estado en este caso, calificándola de cómplice de las actuaciones que consideran ilícitas. En su comunicado, el sindicato ha criticado duramente la falta de respuesta institucional ante lo que describen como un ataque al Estado de Derecho.
Por su parte, fuentes del Gobierno no han emitido comentarios oficiales sobre esta nueva acción legal. Sin embargo, el PSOE ha defendido en anteriores ocasiones la legitimidad de los acuerdos alcanzados durante las negociaciones de investidura, desestimando las acusaciones de ilegalidad como “una estrategia de politización judicial sin fundamento”.