Aunque existe la creencia de que las pieles oscuras están naturalmente protegidas del Sol, los dermatólogos alertan de que esta suposición puede ser peligrosa. La melanina, que actúa como una barrera parcial contra los rayos ultravioleta (UV), no brinda una protección completa, detalla Diario De Yucatán
Expertos como la doctora Jenna Lester, fundadora de la Clínica de Piel de Color de la Universidad de California en San Francisco, enfatizan que el uso de protector solar debe ser universal, aunque los motivos pueden variar según el tono de piel. En pieles oscuras, más que prevenir quemaduras, el protector ayuda a combatir problemas como manchas, arrugas prematuras y otras afecciones dermatológicas.
A pesar de una menor incidencia de cáncer de piel en personas negras e hispanas, estas poblaciones presentan tasas de supervivencia más bajas debido a diagnósticos tardíos. “Los melanomas suelen aparecer en zonas poco visibles como las palmas de las manos o las plantas de los pies”, explicó Lester, lo que dificulta su detección temprana.
De forma similar, la doctora Oyetewa Asempa, del Colegio de Medicina de Baylor, destacó que muchos trastornos cutáneos frecuentes en pieles oscuras, como la hiperpigmentación post-acné o las manchas, están vinculados con la exposición solar no protegida. En su experiencia, una adecuada rutina con protector solar podría prevenir gran parte de estos problemas.
Incorporar el bloqueador a la rutina diaria es clave. Los especialistas recomiendan productos con SPF 30 o superior, aplicados en cantidad suficiente y reaplicados cada dos horas si hay exposición prolongada. Lester advierte de que “la mayoría de las personas no usa suficiente”, y señala que para el rostro debe utilizarse el equivalente a dos dedos de producto.
Una barrera común para quienes tienen piel más oscura es el efecto blanquecino que dejan algunos protectores, especialmente los minerales. Para evitarlo, los dermatólogos aconsejan fórmulas químicas o solares con color, que también ofrecen beneficios cosméticos al reducir la aparición de manchas.
Además del protector solar, se recomienda el uso de ropa con protección UV, sombreros de ala ancha y buscar sombra durante las horas pico de radiación.
El mensaje de los especialistas es contundente: ningún tono de piel es inmune a los efectos del sol. Adoptar medidas preventivas es fundamental para preservar la salud cutánea a largo plazo.