El Defensor del Pueblo alertó de la alta incidencia de abusos y despotismo en este centro penitenciario madrileño, en el que estuvieron los independentistas catalanes y el comisario Villarejo
Enrique Valdivieso de la Hoz fue destituido el pasado 16 de abril de su puesto de director del Centro Penitenciario Madrid VII (Prisión de Estremera) tras una larga lista de denuncias por acoso de una parte de los trabajadores/as de este centro.
El secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Luis Ortiz, que fue quien le llamó personalmente para comunicarle su cese, tenía sobre su mesa un informe/denuncia con quejas de varias empleadas del centro relacionadas con abuso de poder e incluso acoso sexual. Valdivieso le rogó a Ortiz, incluso con alguna lágrima, que no le destituyera, pero el secretario general se mostró implacable.
Según fuentes de Prisiones, el informe contenía incluso alguna foto del director enviada a una subordinada en la que se mostraba semidesnudo.
Y no era la primera vez que Ortiz recibía quejas de funcionarios del centro que pedían el cese de Valdivieso de la Hoz por actitudes despóticas. Los sindicatos tampoco le querían y el clima en el centro se había convertido en asfixiante.
Según fuentes penitenciarias, era un secreto a voces entre los funcionarios de esta prisión el supuesto despotismo y abuso de poder del director en su relación con mujeres funcionarias de las nuevas promociones de Prisiones.
Tras el cese, el secretario general Ortiz designó a José Ángel Laso Fernández como nuevo director del Centro de Estremera. Laso se encontraba desempeñando las funciones de Subdirector de Régimen en la prisión de Topas (Salamanca).
Valdivieso fue nombrado para la dirección de programas del Centro de Inserción Social de Alcalá de Henares, CIS, Melchor Rodríguez García, un puesto sin responsabilidad de mando ni con funcionarios a su cargo.
La prisión de Estremera está situada en la localidad del mismo nombre, a 67 kilómetros de Madrid, en el límite provincial entre Madrid y Cuenca, y está considerada una de las más conflictivas y peligrosas del país.
Registra el mayor número de agresiones a funcionarios de prisiones de toda España y de denuncias de malos tratos a presos. Se multiplicó en un 400% durante la etapa de Valdivieso al frente del presidio.
El Defensor del Pueblo ya alertó, en un informe de septiembre de 2019, de la alta incidencia de este tipo de episodios en Estremera. En los últimos cinco años registró 41 denuncias.
Los supuestos malos tratos sufridos en septiembre de 2020 por un preso tras presentar hematomas en glúteos, piernas y plantas de los pies había provocado la intervención de un juez de instrucción y del Comité Europeo para la Prevención de la Tortura, dependiente del Consejo de Europa.
Actualmente, casi la mitad de la plantilla está formada por funcionarios en prácticas, sin experiencia penitenciaria, obligados a trabajar en ella durante 18 meses hasta ser nombrados de carrera. La situación laboral es insostenible, se han cambiado de prisión más de 400 funcionarios en los dos últimos años.
Asimismo, funcionarios del centro han denunciado sentirse “desprotegidos” y señalaron directamente al director de la cárcel por su gestión “autoritaria”, que ha creado un clima de desconfianza e inseguridad, señalan.
La Secretaría General de Instituciones Penitenciaria recibió a lo largo de 2023 denuncias de trabajadores contra el ex director Enrique Valdivieso por acoso laboral y por negar derechos laborales a los funcionarios, así como por negarse de forma sistemática a autorizar el disfrute de vacaciones retribuidas o de permisos por asuntos familiares.
Fuentes sindicales denuncian que la mayoría de los supuestos episodios de acoso no están recogidos en la estadística oficial ni se tramitan por miedo a las consecuencias desde la Administración penitenciaria.
Valdivieso es funcionario de prisiones desde 1981 y vinculado a Instituciones Penitenciarias desde hace más de 43 años.
Fue director de la cárcel de Herrera de La Mancha (Ciudad Real) durante dos años. Y también del penal alicantino de Fontcalent antes de convertirse en el máximo responsable de la prisión madrileña de Estremera en el año 2013, durante el Gobierno del Partido Popular.
Fe de errores. La foto que acompañó durante varias horas esta información no era la del director de Estremera. La imagen era de una persona que se llama igual que él, pero nada tiene que ver con los hechos que aquí se describen.