No es la primera vez que la figura sufre un ataque de este tipo, el pasado verano arrancaron la alondra que sostiene entre las manos
La estatua en homenaje al poeta y dramaturgo Federico García Lorca, ubicada en la céntrica plaza de Santa Ana de Madrid, ha sido de nuevo vandalizada. Esta vez, el monumento presenta el insulto ‘puto’ escrito en la parte trasera.
No es la primera vez que la estatua del granadino, frente al Teatro Español, es objeto de ataques de este tipo. Este pasado verano arrancaron la alondra que sostiene entre las manos.
La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica lamenta lo ocurrido y ha denunciado los hechos a través de su cuenta de Twitter: “Su asesinato sigue impune. Su cadáver desaparecido. Su memoria todavía camina entre fusiles”
Alguién escribió la palabra "PUTO" en un lugar nada inocente de la estatua de Federico García Lorca, en la Plaza de Santa Ana de Madrid. Su asesinato sigue impune. Su cadáver desaparecido. Su memoria todavía camina entre fusiles. pic.twitter.com/g5JrTitfZ0
— Memoria_ARMH (@ARMH_Memoria) January 23, 2023
Por su parte, fuentes del área de Cultura del Ayuntamiento de Madrid han trasladado a Europa Press que los técnicos municipales comprobarán la magnitud de los posibles daños y se procederá a su limpieza, o reparación llegado el caso, para que la estatua recupere su estado original.
Realizada entre 1984 y 1986
Al cumplirse el cincuenta aniversario del estreno de ‘Yerma’, el entonces director del Teatro Español, Miguel Narros, solicitó al Ayuntamiento de Madrid la colocación de una estatua en recuerdo del escritor para instalarla en la plaza de Santa Ana, frente al Teatro.
La escultura de Lorca fue realizada por el escultor Julio López Hernández entre 1984 y 1986 y estuvo instalada en el Cuartel del Conde Duque diez años, hasta la finalización de las obras de la plaza. Se trata de la figura completa, de tamaño natural y en bulto redondo, del poeta vestido con traje de chaqueta.
Está representado en pie y sujeta entre sus manos una alondra a punto de volar para posarse en el teatro; la pierna derecha está ligeramente retrasada para dar sensación de movimiento. Descansa sobre un pedestal de granito con una lápida de caliza en la parte frontal con inscripción.