Hoy: 23 de noviembre de 2024
La apuesta por trabajadores de mayor edad en el mercado laboral se revela como un impulsor de economías más robustas y resistentes a las crisis, según un estudio llevado a cabo por Oxford Economics y la Universidad de Salamanca en colaboración con el Centro Internacional sobre el Envejecimiento (CENIE).
El informe, titulado “El impacto de la edad en el mercado laboral y en la resiliencia de las empresas en España”, destaca que una fuerza laboral compuesta por trabajadores de más edad influyó de manera positiva en la resiliencia económica (ventas, empleo, productividad e inversión) de las empresas españolas durante la Gran Recesión entre 2008 y 2014.
Se enfatiza la importancia de promover la participación activa de los trabajadores de mayor edad en la fuerza laboral como un elemento clave para forjar economías más sólidas ante situaciones de crisis.
El documento evidencia que, en el contexto español, las empresas con una plantilla de trabajadores de mayor edad experimentaron un crecimiento en ventas, empleo, productividad y una mayor tasa de inversión neta durante la Gran Recesión. Esto se atribuye a la experiencia, conocimientos y habilidades adicionales que suelen poseer los trabajadores de mayor edad, lo que fortalece la productividad y la capacidad de las empresas para resistir las crisis económicas.
Sin embargo, el informe alerta sobre posibles desafíos futuros, indicando que la reducción de la fuerza laboral combinada con el aumento de jubilados podría afectar el crecimiento económico y poner a prueba el sistema de pensiones, teniendo repercusiones potenciales en toda la sociedad, no solo en las personas mayores.
El informe también destaca la baja tasa de empleo entre las personas de 55 años o más en España, situación que se agravará con el envejecimiento de la población.
Con el objetivo de aprovechar los beneficios de una fuerza laboral más longeva, se insta a adoptar medidas urgentes para aumentar la participación de los trabajadores mayores en el mercado laboral. Entre estas medidas se incluye la necesidad de que las autoridades garanticen que los trabajadores mantengan su interés por trabajar a medida que envejecen. Una opción planteada sería el aumento de la edad de jubilación y la desincentivación del retiro anticipado.
Asimismo, se recomienda mejorar la calidad y el entorno laboral para los trabajadores de mayor edad. Los expertos sugieren que las autoridades deben introducir normativas destinadas a proteger a estos trabajadores mediante directrices de seguridad en el lugar de trabajo.
Otras medidas propuestas incluyen la promoción de oportunidades de readaptación profesional y formación complementaria. Se sugiere subsidiar programas de formación dirigidos a empleados mayores para incentivar a los empleadores a desarrollar este tipo de iniciativas.
El informe hace un llamado a las autoridades para asegurar no solo que los trabajadores de mayor edad deseen seguir trabajando, sino también que las empresas estén dispuestas a retenerlos y contratarlos.
Entre las iniciativas clave se encuentran la eliminación de la discriminación por edad en los procesos de reclutamiento, promoción o retención de empleados. Además, se propone la introducción de incentivos económicos para motivar a las empresas a contratar y retener a trabajadores de mayor edad, así como fomentar la implementación de prácticas de gestión de la edad en las empresas.”