Hoy: 23 de noviembre de 2024
Inmaculada Casal, presentadora de televisión, comenzaba su programa Andalucía de Tarde rodeada de sus compañeros y adelantaba que se encontraba “bastante indignada” y recordaba que no es de su gusto moderar una mesa en la que ella y María del Monte son protagonistas de la historia.
La pareja de Del Monte comenzaba diciendo: “Creo que a nosotros nos robaron hace unos meses y ahora pues me han robado también parte de mi intimidad al hacerse públicas unas imágenes de nuestras declaraciones dentro de la sala”.
Destaca que fue una vista privada, no una audiencia pública y que el proceso está en instrucción, no es un caso cerrado. Reconocía que ha sido un golpe muy duro para ellas y para sus familiares. “La verdad que, tanto a mí como a mi familia, pues nos han hecho mucho daño. Me indigna porque creo que no es justo” confesaba a sus compañeros.
Comentaba cómo ellas habían declarado en la sala a puertas cerradas y que, aunque las declaraciones estaban siendo grabadas, solo tendrían acceso a ellas las partes, el fiscal y el juez. Además, reconocía sentirse indefensa por haber perdido la seguridad y tranquilidad al hacerse públicos detalles que no habían contando ni a sus familiares.
“Ahora resulta que lo que hablo en los juzgados, lo sabe toda España, porque no lo sabía ni mi familia. Yo los detalles esos, tan escabrosos, creo que eso no es información, que eso es morbo, y lo que se diga dentro de una sala, de un juzgado, creo que es muy… que perjudica mucho una investigación. Entonces, es algo tan íntimo que me encuentro indefensa, de verdad”, asegura.
Casal pide a la prensa que les dé un respiro a ella y a María del Monte: “Bastante está hablando todo el mundo, yo lo único que quiero manifestar es que nos dejen en paz”. Terminaba el programa reconociendo que el tema ya le está superando y recalcaba, una vez más, que “habrá que tomar medidas y diferenciar entre lo que es información y lo que es morbo o mero cotilleo”.