Casi 5.000 litros de aceite de oliva virgen extra desaparecieron de una cooperativa de la Sierra Sur de Sevilla durante una madrugada de enero. Ahora, la Guardia Civil ha logrado esclarecer el golpe con la detención de dos hombres residentes en Alcalá de Guadaira, Sevilla, a quienes se acusa de perpetrar el robo y de formar parte de una red que distribuía el producto en venta ambulante en Granada.
La operación, dirigida por el Equipo ROCA de Osuna y enmarcada en el Plan contra los robos en explotaciones agrícolas y ganaderas, ha destapado una estructura delictiva con conexiones en varias provincias andaluzas, especializada en atacar pequeñas almazaras y cooperativas con escasa protección.
Según fuentes del Instituto Armado, los autores sabían perfectamente qué buscaban: un aceite de gran calidad, valorado en el mercado por su pureza y origen. Tras el robo, parte de la mercancía se canalizó a través de puntos de venta callejera, sin trazabilidad ni control sanitario.
Las pesquisas contaron con el apoyo clave de la Guardia Civil de Villanueva de San Juan y la Policía Local de El Saucejo, cuyos agentes ayudaron a estrechar el cerco sobre los responsables. Aunque ya hay detenidos, la investigación sigue abierta y no se descartan nuevas capturas. En plena escalada de precios del aceite, este tipo de delitos se han multiplicado, confirmando que el “oro líquido” también atrae a las mafias.
Además, los investigadores han alertado sobre el creciente interés de redes delictivas por el aceite de oliva virgen extra, considerado “oro líquido” por su valor en el mercado nacional e internacional. La Guardia Civil insiste en reforzar las medidas de seguridad en cooperativas y almazaras ante la escalada de estos robos organizados.