La Policía Nacional, en una operación conjunta coordinada por Eurojust y con el apoyo de Europol, ha logrado desarticular una red criminal internacional dedicada al blanqueo de capitales procedentes de estafas de inversión en internet. En el operativo han participado también las autoridades de Portugal, Italia, Rumanía y Bulgaria.
La investigación, iniciada en octubre de 2022 a raíz de una denuncia de las autoridades lituanas, ha culminado con la detención de seis personas: tres en España y las demás en Portugal, Rumanía y Bulgaria. Durante la operación se practicaron cinco registros y se intervinieron 50 cuentas bancarias en España y 33 en otros países europeos.
El alcance económico de la red resulta enorme: se estima que blanquearon más de 102 millones de euros a través de un entramado financiero internacional. Además, se han intervenido monedas virtuales por valor de 80.000 euros y 20.000 dólares, así como lingotes de oro, monedas de plata y joyas de alto valor.
La organización había creado un complejo sistema de sociedades ficticias y plataformas fraudulentas, diseñadas para captar víctimas en al menos 30 países. A través de páginas web con apariencia profesional y supuestas gestoras de inversión, ofrecían rentabilidades irreales en criptomonedas, divisas y productos tecnológicos.
El modus operandi era claro: una red de teleoperadores, con trato cercano y convincente, contactaba con inversores y les animaba a transferir fondos a empresas pantalla. Estas sociedades carecían de actividad económica real y funcionaban únicamente como intermediarias para canalizar el dinero estafado.
Una vez recibidos los fondos, el capital se fraccionaba rápidamente y era transferido a plataformas de intercambio de criptomonedas. Allí, el dinero era convertido en activos digitales como bitcoin (BTC) o tether (USDT) y redirigido a billeteras opacas bajo control de la propia organización.
La investigación ha evidenciado cómo esta red no solo lograba engañar a miles de inversores en distintos países, sino que también utilizaba un sofisticado entramado financiero para dificultar el rastreo del dinero. Gracias a la cooperación policial internacional, su estructura ha quedado desmantelada.
Con este golpe, la Policía Nacional y sus socios europeos han frenado una de las mayores redes de blanqueo ligadas a estafas de inversión online en Europa, reforzando la advertencia de que la inversión en plataformas no verificadas supone un riesgo altísimo para los ciudadanos.