La portavoz del PP manifestó su apoyo a la caza y pide al Ejecutivo que aborde su regulación pactando una ley con los sectores implicados y asegurando que se respetan las competencias de cada administración
La secretaria general y portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, ha exigido al Gobierno la retirada del proyecto de ley de protección, derechos y bienestar de los animales tras mantener una reunión telemática con el presidente y con el vicepresidente de la Federación Española de Caza, Manuel Gallardo y José María Mancheño, respectivamente, y en la que también ha participado el vicesecretario de Coordinación Autonómica y Local, Pedro Rollán.
Gamarra expresa la necesidad de consensuar un nuevo texto con expertos, entidades, asociaciones implicadas, CC.AA. y ayuntamientos. Señalado que se deben implicar a todos los sectores en la elaboración de las leyes para legislar de la mano.
En la reunión, se han puesto de manifiesto por ambas partes los “atropellos” de esta ley con una “clara intencionalidad política de romper consensos”. La secretaria general señaló la “importancia de implicar a todos los sectores en la elaboración de las leyes para legislar de la mano, y no a espaldas”, de las necesidades “reales” de los españoles, al tiempo que lamentó la “deriva autoritaria” de un Gobierno que “ha renunciado al diálogo y se ha acostumbrado a imponer su ideología”.
Finalmente, la portavoz ha sido quien ha trasladado a la Federación Española de Caza el apoyo del PP ante sus reivindicaciones frente al impacto de esta ley.
“Ofrecemos diálogo con los sectores implicados, con los que ya llevamos más de un año trabajando, para consensuar un texto adecuado y para que el Gobierno rectifique, que es cuando acierta”, sentenció Gamarra.
La ley de bienestar animal y la caza
La inclusión de los perros de caza y pastoreo en esta nueva ley supone se equipare a los perros de caza, pastoreo y ganadería con los animales domésticos.
En este sentido, el presidente de la Real Federación Española de Caza considera que la nueva normativa está redacta por responsables “que no conocen cómo funciona el mundo rural” y sólo anteponen beneficios para “el mundo animalista urbano, de asfalto, que nada tiene que ver ni con la caza ni con el mundo en los pueblos”.