Miles de fieles están acudiendo a Roma este fin de semana para asistir al funeral del Papa Francisco, y las aerolíneas han respondido con una escalada vertiginosa de precios. Volar desde España a la capital italiana cuesta ya tres veces más que hace solo una semana.
Los primeros aumentos se detectaron el pasado martes, un día después del fallecimiento del pontífice. Desde entonces, las tarifas no han dejado de crecer: un 14% el martes, un 64% el miércoles, y hasta un 75% más este viernes en comparación con el año pasado.
El repunte afecta tanto a aerolíneas tradicionales como de bajo coste. Las primeras alcanzan un precio medio de 151 euros por trayecto, un 39% más caro que la semana anterior. Las low cost no se quedan atrás, con un incremento del 38% y un precio medio de 102 euros por vuelo.
El fenómeno refleja la enorme movilización global que está provocando la muerte del Papa Francisco, cuyo funeral reunirá a líderes mundiales, representantes religiosos y decenas de miles de fieles. A falta de plazas en hoteles y con los vuelos saturados, se espera una ciudad colapsada por el fervor popular y el homenaje histórico.