Este jueves entra en vigor un decreto que cambiará la vida de las personas con esclerosis lateral amiotrófica (ELA) y otras enfermedades complejas. El Gobierno destina 500 millones de euros para reforzar el Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD). La norma busca cumplir la Ley ELA, aprobada hace un año, y responder a las demandas de los pacientes.
La medida incluye la creación del Grado III+ de dependencia extrema. Este nuevo grado permitirá que quienes padecen enfermedades con rápida progresión y alto nivel de discapacidad tengan acceso a cuidados intensivos. Entre los servicios garantizados está la atención especializada 24 horas, apoyo respiratorio y asistencia para la deglución. La ratio estimada será de cinco profesionales por cada paciente, lo que asegura una atención personalizada y constante.
El decreto se publicará este miércoles en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y deberá ser convalidado por el Congreso en un plazo de 30 días. Desde el Gobierno destacan que este es un “hito histórico” para el sistema de dependencia en España. Según las autoridades, la medida permitirá un sistema más ágil, justo y centrado en la dignidad de las personas, según ha publicado Europa Press.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha recordado en redes sociales que esta medida corrige los recortes de legislaturas anteriores, que dejaron fuera del sistema a más de 175.000 personas. Sánchez destacó que el decreto avanza tanto en financiación como en calidad del sistema de dependencia. “Por un país que cuida de todos y todas. Seguimos avanzando en derechos”, afirmó.
El ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, también celebró la medida. Señaló que la financiación de la atención 24 horas para pacientes con cuidados de gran complejidad ya es una realidad. Según Bustinduy, el decreto refleja un Estado social que cumple su compromiso y fortalece el modelo de cuidados para enfrentar los retos del futuro.
El Grado III+ de dependencia extrema reconoce un derecho subjetivo a cuidados intensivos. Esto significa que los pacientes con ELA y otras enfermedades graves recibirán apoyo especializado en todo momento. La atención no solo incluye asistencia médica, sino también acompañamiento social, para garantizar la máxima calidad de vida.
Con este decreto, España da un paso firme hacia un sistema de dependencia más robusto. La combinación de financiación, personal especializado y supervisión continua busca atender las necesidades de los pacientes de forma integral y humana. Para quienes viven con ELA y sus familias, este jueves marca un antes y un después.