Nicolás Petro, hijo del presidente Gustavo Petro, reconoció que dinero de exnarcotraficante ingresó a la campaña presidencial, generando controversia en el gobierno izquierdista
La confesión de Nicolás Petro, hijo del presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha sacudido los cimientos del gobierno izquierdista al admitir que fondos provenientes de un antiguo capo del narcotráfico se introdujeron en la campaña presidencial de su padre.
En medio de un proceso judicial por lavado de activos y enriquecimiento ilícito, Nicolás Petro reveló que parte de los 400 millones de pesos (aproximadamente USD 102,000) entregados por Samuel Santander Lopesierra, extraditado por narcotráfico a Estados Unidos en 2003, contribuyó a la financiación de la campaña en el pasado año.
El fiscal Mario Burgos informó que incluso otro hijo, vinculado a Alfonso “el turco” Hilsaca, también aportó dinero a Nicolás Petro, quien reconoció haber destinado una porción a su beneficio personal y otra a la campaña presidencial.
Aunque en un inicio negó los señalamientos, Nicolás Petro cambió de actitud tras su detención y aceptó colaborar con la justicia. El presidente Gustavo Petro no negó la financiación ilegal, aunque desmintió conocer los detalles.
El escándalo ha generado controversia en el país y ha puesto en tela de juicio la integridad de la campaña presidencial y la gestión del gobierno en medio de un proceso judicial que sigue evolucionando.