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Energy Control da la voz de alarma sobre los pinchazos en las discotecas

Discoteca

Jóvenes en una discoteca | Fuente: Montecruz Foto, vía Midetoy

Las circunstancias que rodean a dichos pinchazos aún no están claras, aunque todo apunta al uso de sustancias psicoactivas y al consumo de alcohol como principales responsables

En España ya son varios casos donde se denuncia la llegada del denominado “needle spiking“, una técnica mediante la que se busca la sumisión química de la persona. Desde el programa Energy Control dedicado a la divulgación de información sobre drogas, han lanzado un comunicado donde expresan tener dudas sobre la noticia relacionada a la sumisión química.

“En las últimas semanas, ha aumentado el número de denuncias y publicaciones en redes sociales y medios de comunicación sobre pinchazos sufridos por mujeres en espacios de ocio. Estos incidentes han sido catalogados como “sumisión química”, tanto por parte de las personas que lo han sufrido como por los medios de comunicación”, explican en el comunicado.

Energy Control recalca que la sumisión química puede producirse de dos maneras, Una oportunista, generalmente producto del consumo previo de sustancias psicoactivas, como los estupefacientes. Otra, premeditada, cuando el suministro de dicha sustancia psicoactiva se produce deliberadamente por parte del agresor.

El fenómeno del needle spiking ha sido considerado, desde sus inicios, como una forma de agresión sexual facilitada por drogas. Sin embargo, hasta la fecha, tampoco existen evidencias claras de las sustancias utilizadas bajo esta modalidad. Asimismo la teoría presenta a día de hoy múltiples agujeros. Según subraya el comunicado, “inyectar una sustancia requiere conocimiento médico y técnico”, lo que dificultaría el “pinchazo” a una mano inexperta.

Hasta el momento no se han producido detenciones ni la incautación de los objetos utilizados para estos pinchazos. Por tanto, no se puede asegurar con rotundidad que estos hayan sido realizados mediante agujas. 

Sin embargo, sí que se ha podido observar un patrón común en cuanto a la presencia recurrente de “alcohol y benzodiazepinas” en el momento del pinchazo.

Desde Energy control también han indicado que, en caso de sufrir un pinchazo o creer haber sido víctima de uno, “se acuda lo más rápidamente posible a un centro sanitario para la realización de análisis toxicológicos y la denuncia ante los CFSE. Y que de producirse en el interior de un local de ocio, “el personal de los mismos debe facilitar en lo posible este procedimiento de actuación, además de la atención inmediata a la persona y la posible identificación de la/s persona/as agresora/s”.

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