El Poder Judicial ‘fuerza’ al juez Peinado a entregarle el vídeo del tenso interrogatorio de Bolaños en su despacho de La Moncloa

El Consejo, cuya mitad de sus 20 vocales, más la presidenta, los designó Bolaños, ha abierto diligencias informativas al instructor del ‘caso Begoña’

El Consejo General del Poder Judicial ya tiene en su poder el vídeo del tenso interrogatorio que tuvo lugar en La Moncloa el pasado mes de abril. Bolaños se quejó de la instrucción y el Consejo, lejos de apoyar al juez, le ha abierto diligencias informativas.

Al abrir diligencias informativas pidió a Peinado que le explicara determinadas actuaciones llevadas a cabo durante la instrucción del Caso Begoña que afectan al ministro de Justicia, Félix Bolaños. Y que le entregue el vídeo del interrogatorio que hizo a Bolaños. No es su jefe pero es el ministro de Justicia.

Bolaños, tras su declaración, le puso una queja a Peinado ante el Consejo del Poder Judicial en la que deja entrever que el juez se excedió en su interrogatorio en La Moncloa.

Y también se queja de haberse enterado por la prensa de su citación judicial para declarar en el marco del caso de la mujer del presidente Pedro Sánchez.

Un caso como estos tiene un recorrido nulo en la oficina de disciplinaria del Consejo. Se archiva. Casi sobre la marcha. Pero aquí quien se queja del juez ante el Consejo, no solo es el notario mayor del reino, es quien designó a 11 de los 21 componentes de este departamento.

El juez ha visto dos posibles delitos en la conducta de Bolaños. Uno de malversación de caudales públicos y otro por haber mentido en ese judicial, ante el juez.

Y por ambas cosas ha elevado a la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo una exposición razonada en la que considera que hubo malversación cuando se contrató a Cristina Álvarez y, además, mintió en su declaración judicial.

La fama de Sánchez de ser un embustero parece que ha llegado incluso al despacho del juez. Cómo sería su declaración que, y es algo muy inhabitual, que el juez señala que le ha mentido a él. Está a la que espera de que el Supremo se pronuncie.

Peinado interrogó al ministro de Justicia y jefe máximo de la secretaría general de La Moncloa, Félix Bolaños, con la finalidad de saber quién y por qué contrató a Cristina Alvárez como asesora de Begoña Gómez.

Begoña la utilizó, no para lo que a priori podía ser un cometido relacionado con temas institucionales, sino como intermediaria con sus socios y para pedir dinero destinado a su cátedra en la Complutense de Madrid, entre otras actividades ajenas a lo que debía ser su papel.

El juez Peinado, que se jubila en octubre de 2026, ha tenido también que contestar al Consejo y adjuntar papeles acreditativos del correcto funcionamiento del caso Begoña y otros aspectos de la instrucción que cuestiona el ministro Bolaños. Es una injerencia en la tarea judicial, es ponerle una espada de damocles, como diciéndole: si te equivocas, te desmenuzaremos.

La cuestión es que, en pleno huracán Begoña, el Poder Judicial abre diligencias informativas al juez que lleva la más sensible instrucción de España, la que afecta por tráfico de influencias, entre otros delitos, a la mujer de Sánchez.

Y en ese poder judicial hay al menos 11 vocales que le deben el puesto a Bolaños. Él los puso ahí.

¿Se lo pondrán fácil al juez Peinado?