El Papa León XIV reafirmó que los sacerdotes deben mantener el celibato y adoptar una actitud “firme y decidida” ante situaciones que puedan generar escándalo, así como frente a cualquier forma de abuso, especialmente si se trata de menores, recoge Excelsior.
Durante un encuentro celebrado en la Basílica de San Pedro con cerca de 300 obispos con motivo de su Jubileo, el Pontífice subrayó las cualidades esenciales que deben distinguir a los buenos pastores.
Además de llevar un estilo de vida “sencillo, sobrio, generoso” y alejado de los bienes materiales y los favoritismos, recalcó que “el obispo también vive esa otra forma de pobreza que es el celibato y la virginidad”.
León XIV aclaró que el celibato no se limita a una condición formal, sino que implica también “practicar la castidad del corazón y de la conducta” como reflejo del verdadero rostro de la Iglesia, “que es santa y casta”.
Esta es la primera vez que Robert Prevost aborda públicamente la cuestión del celibato sacerdotal desde que fue elegido Papa, aunque se trata de un tema que ya había meditado profundamente en su etapa como prefecto del Dicasterio para los Obispos.