Menos mal que siempre nos quedará el deporte español para soportar tanta mediocridad política. En un periodo de 48 horas España brilla en diferentes disciplinas por las que sobran razones de admiración en el mundo: motociclismo, fútbol y el ‘último baile’ del que ha sido probablemente mejor deportista mundial de todos los tiempos: Rafa Nadal.
No lo tenía cerrado al cien por cien, pero el piloto español Jorge Martín (Ducati) se ha convertido en campeón del mundo de MotoGP 2024 después de defender su ventaja al frente del Mundial de motociclismo al ser tercero en la última carrera del definitivo Gran Premio Solidario de Barcelona, en la que la victoria no ha bastado al italiano Francesco Bagnaia para arrebatarle el título. Con tranquilidad y consciente de que un noveno puesto era suficiente para coronarse, el madrileño rodó sin arriesgar y administró su ventaja al frente de la clasificación para cruzar la línea de meta en tercer lugar, justo por detrás de Marc Márquez (Ducati), que finalizó segundo.
Martín se convierte de esta manera tan brillante en el quinto español en proclamarse campeón de la categoría reina tras Alex Crivillé, Jorge Lorenzo, Marc Márquez y Joan Mir. Se dice pronto, pero llegar aquí está al alcance de muy pocos.
Juego de excelencia
La segunda nos llega de la mano de Luis de la Fuente, que ha conseguido que el combinado español de fútbol se clasifique con nota como primera de grupo en la Liga de Naciones y que, en caso de vencer hoy a Suiza en el último partido de eliminatoria España tendría la posibilidad de acabar el año como número uno del ranking FIFA. Parece fácil, pero no lo es y menos cuando se hace con juego de excelencia y alegre que asusta a los rivales.
Y la tercera tiene lugar a partir de este martes en Málaga en la Copa Davis en la que Rafa Nadal juega sus últimos partidos oficiales tras el anuncio de su retirada. Consciente de que no compite desde los Juegos Olímpicos asegura que será el primero en saber si está para ganar o no, con la intención de tener la “opción de ganar una Copa Davis, jugando o animando desde la grada”. El de Manacor, que no compite de manera oficial desde el verano en Paris 2024, pondrá fin a su carrera en el torneo que le dio su “primera gran alegría”.
Al alcance de la leyenda
El martes se cierra el ciclo del mejor deportista español de todos los tiempos y para muchos también el mejor deportista del mundo no solo por sus triunfos, también por como los ha competido y ganado y, sobre todo, por cómo ha perdido desde la entrega absoluta y el respeto a sus rivales. Parece fácil pero no lo es porque solo está al alcance de la leyenda.
Pocas cosas como el deporte han unido más a este país y pocas cosas pueden hacer que este país saque pecho de orgullo ante el mundo porque en otras muchas dejamos tanto que desear. ¡Tienen tanto que aprender los dirigentes y gobernantes de empatía, de lealtad, compromiso, esfuerzo y de entrega a un país…!