Hoy: 11 de octubre de 2024
En una sesión plenaria, el Ayuntamiento de Sevilla ha logrado la aprobación del artículo 12 de la Ordenanza de Medidas para el Fomento y la Garantía de la Convivencia Ciudadana en los Espacios Públicos. La iniciativa, respaldada por los votos del Partido Popular y Vox, permite a la Policía Local multar con hasta 750 euros a quienes “transiten o permanezcan en la vía pública o espacios públicos sin ropa o únicamente en ropa interior; con ropa o complementos que representen los genitales del ser humano o con muñecos o elementos de carácter sexual”.
Sin embargo, la medida ha generado fuertes críticas por parte del PSOE y la confluencia Con Podemos-IU, quienes la consideran poseedora de una “redacción ambigua” y abierta a interpretaciones. Estas fuerzas políticas expresaron su preocupación por establecer sanciones administrativas por comportamientos que no constituyen delito en el Código Penal.
Juan Carlos Cabrera, concejal socialista, ha manifestado su inquietud sobre el intento de definir “qué es ordinario o no lo es; qué es lo obsceno o no lo es”, cuestionando incluso la definición de “ropa interior” y planteando la posibilidad de multas por llevar ciertas prendas.
Desde Con Podemos-IU, el concejal Ismael Sánchez ha acusado al gobierno municipal de querer “ganar una batalla ideológica” y ha cuestionado la creencia en la libertad de expresión y la sátira por parte del equipo del alcalde ‘popular’ José Luis Sanz. Este último, a su vez, ha defendido la medida argumentando que busca poner orden frente a despedidas de soltero que considera “un desprecio a la ciudad”.
El delegado de Seguridad, Ignacio Flores, ha criticado a las fuerzas de izquierda por poner “excusas para no trabajar” y ha destacado la ausencia de alegaciones, aunque el concejal Sánchez ha recordado que estas se presentan a ordenanzas completas, no a modificaciones puntuales.
Desde Vox, el concejal Gonzalo García de Polavieja ha reconocido que la modificación “no es la solución perfecta” pero ha cuestionado la falta de alternativas propuestas por el PSOE en los últimos ocho años.
En una nota oficial, el alcalde José Luis Sanz ha explicado que la medida representa “un paso definitivo para regular un tipo de turismo que no le interesa a la ciudad”. Ha afirmado cumplir con su compromiso de regular las despedidas de solteros, calificándolas como comportamientos perturbadores para la convivencia en el Casco Histórico de la ciudad. Sanz ha expresado la importancia de garantizar la convivencia entre turistas y sevillanos, subrayando la necesidad de atraer un turismo de calidad.