Tokio acoge desde este sábado hasta el 21 de septiembre los Campeonatos del Mundo de Atletismo al Aire Libre. La selección española, formada por 56 atletas, llega con la ilusión de repetir la brillante actuación de Budapest 2023 y de igualar o superar las cinco medallas de hace dos años.
El atletismo español atraviesa un gran momento. En los Juegos Olímpicos de París 2024 logró una de las mejores actuaciones de su historia, solo comparable a Barcelona 92, con dos oros, una plata, un bronce y cinco diplomas.
Entre los 30 hombres y 26 mujeres convocados destacan los campeones olímpicos María Pérez y Jordan Díaz. Pero la gran ausencia será Ana Peleteiro-Compaoré, que renunció a la cita por su embarazo, según recoge Europa Press.
En Budapest 2023, la marcha dio cuatro de las cinco medallas españolas. María Pérez y Álvaro Martín firmaron sendos dobletes dorados en 20 y 35 kilómetros. Un año después, juntos se proclamaron campeones olímpicos en el nuevo relevo mixto. Tras la retirada del extremeño, Pérez se ha quedado como gran referencia de la disciplina.
La marchadora granadina, subcampeona olímpica en 20 km, parte en Tokio con la mejor marca mundial del año (2:38:59). Sus principales rivales serán la peruana Kimberly García, la italiana Antonella Palmisano y varias asiáticas. En la distancia corta tendrá que medirse con la japonesa Nanako Fujii, la china Yang Jiayu y la australiana Jemma Montag. En la categoría masculina, Paul McGrath se perfila como la mejor opción española en los 20 km.
El campeón olímpico de triple salto, Jordan Alejandro Díaz, también lidera al equipo español. Aspira a cerrar la triple corona tras conquistar en 2024 el oro europeo. Será su debut en un Mundial con la camiseta española, aunque su estado de forma genera incógnitas.
En 2025 apenas ha competido por una lesión de rodilla. Reapareció en los Campeonatos de España con un salto de 17.16 metros, lejos de su mejor marca personal (18.18). Aun así, figura entre los favoritos al podio junto al italo-cubano Andy Díaz, líder mundial del año con 17.80, y al portugués Pedro Pichardo.
La selección española cuenta además con opciones en pruebas individuales y de equipo. Mohamed Attaoui, quinto en la final olímpica de 800 metros, se ha consolidado en la Liga Diamante y es candidato a medalla. El gran favorito sigue siendo el keniano Emmanuel Wanyonyi, único atleta en bajar de 1:42 este año.
En vallas, Enrique Llopis mantiene una clara progresión. Estuvo cerca del bronce olímpico y este verano fue segundo en la prueba de Zurich. El nivel, sin embargo, será altísimo con los estadounidenses Grant Holloway y Cordell Tinch como principales aspirantes al oro.
Los relevos femeninos también generan expectación. El 4×400 y el 4×100 vienen de brillar en los Mundiales de Relevos en mayo. El primero ganó el oro con Daniela Fra, Paula Sevilla, Eva Santidrián y Blanca Hervás. El segundo se llevó la plata con Esperança Cladera, Jaël-Sakura Bestué, Paula Sevilla y Maribel Pérez. Todos ellos repetirán en Tokio.
Asimismo, España intentará mejorar también su número de finalistas respecto a los 10 de hace dos años. Atletas con experiencia internacional y medallas, como Marta García, Fátima Diame, Adrián Ben o Thierry Ndikumwenayo, buscarán abrir hueco en pruebas muy exigentes.
Con esta combinación de campeones, jóvenes promesas y equipos de relevo consolidados, el atletismo español aterriza en Tokio con la esperanza de firmar otro Mundial histórico.